Una rosa a modo de obsequio: sobrevivir a la exigua mortalidad es una misión del mundo de Sumeru. Es la quinta y última parte de la cadena de misiones «Una rosa a modo de obsequio».
Se desbloquea al día siguiente de haber completado la misión anterior, «Una rosa a modo de obsequio: baladas de momentos pasados».
Detalles[]
Habla con Affan para comenzar la misión.
- Utiliza el elemento Dendro para revitalizar las rosas
Recompensas[]
30 Protogema
20 000 Mora
Notas[]
- Completar esta misión otorga el logro "Inscripciones en tablillas" de la categoría Maravillas del mundo.
Diálogos[]
- (Habla con Affan)
- Affan: Mira quién es. Las rosas y yo hemos estado esperándoles.
- Paimon: Sabah también está ya aquí.
- Sabah: Últimamente vengo mucho por aquí. Estoy leyendo las notas del Sr. Shafaqat.
- Sabah: Me sentía muy sola cuando estaba en la Aldea Aaru, pero ahora estoy mucho mejor.
- Sabah: Al menos ya no estoy sola. Tengo a las rosas para hacerme compañía y mis recuerdos de ustedes y el Sr. Affan.
- Sabah: Teniendo unos recuerdos tan hermosos, ya no me siento tan triste.
- Sabah: El Sr. Affan y yo lo hemos estado hablando y voy a quedarme para ayudarle a cuidad de las rosas doradas a partir de ahora.
- Sabah: Cultivaremos más rosas, hasta que podamos llenar todo el jardín. Aunque por ahora, tenemos que esperar a que florezcan.
- Sabah: ¿Todavía recuerdas cómo hiciste florecer las rosas de Sumeru? Deberíamos usar el mismo método.
Te ayudaré.- Sabah: Muy bien, te lo dejo a ti.
- (Opcional, habla con Affan de nuevo)
- Affan: Si estos brotes florecen, podremos plantar más rosas doradas.
- Affan: Pero antes tendremos que ver si los brotes son capaces de florecer.
- (Opcional, habla con Sabah de nuevo)
- Sabah: Utiliza el elemento Dendro para revitalizar los brotes que continúan aletargados.
- (Después de revitalizar las flores)
- ♪ Rosa, rosita del jardín, haz que mis deseos se cumplan al fin ♪
- ♪ Una rosa dorada que canta mientras que de entre fragmentos se alza ♪
- Paimon: Las rosas doradas son realmente bonitas. Verlas florecer ha hecho a Paimon muy feliz.
- Paimon: Todo el trabajo de estos últimos días ha merecido la pena. ¡Paimon está la mar de contenta!
- Por fin ha podido cumplir su sueño.
- Ha merecido la pena.
- Affan: Al final he acabado haciendo algo bueno con mi vida. Shafaqat, te he ayudado a cumplir tu sueño.
- Sabah: Es una pena que no pueda verlo.
- Affan: No digas eso, Sabah. ¿Todavía recuerdas los versos de la canción?
- Affan: ♪ No hay tierra que me dé sustento, pero esta melodía será mi aliento ♪
- Affan: ♪ La música cargará con mi destino, algún día cumpliré mi sino ♪
- Affan: ♪ Desafiarán a la eternidad, sobrevivirán a mi exigua mortalidad ♪”.
- Affan: El recuerdo de su vida, sus rosas doradas y su canción aún siguen con nosotros.
- Sabah: Tiene razón. Al final fue capaz de sobrevivir a la exigua mortalidad.
- Sabah: Muchas gracias por compartir conmigo su historia. Significa mucho para mí.
- Sabah: Como yo, él también fue un exiliado. Ver lo que fue una vez su vida me hace sentir como si hubiera atravesado el tiempo y el espacio.
- Sabah: Ahora ya no solo le veo a él, también me veo a mí misma.
- Sabah: No podré decírselo en persona, pero cargaré con sus remordimientos y seguiré adelante con mi vida.
- Sabah: Si yo también me esfuerzo por honrar su memoria, algún día seré capaz de compensar mis errores.
- Espero que seas feliz.
- No te rindas nunca.
- Sabah: Ya no me siento tan apenada de vivir en este lugar. Y es todo gracias a ustedes.
- Sabah: Las rosas son realmente capaces de traer la felicidad a la vida de las personas. Sr. Affan, sigamos esforzándonos para cultivar aún más flores doradas.
- Affan: Jajaja, me parece un buen trato.
- Sabah: ¡Haré todo lo que pueda!
- (Opcional, habla con Affan después de completar la misisón)
- Affan: ♪ ... ¡Eres tú! ¿Has visto? Las flores están creciendo de maravilla.
- Quiero saber más sobre la balada.
- Affan: Oh, ¿Te acuerdas de esa canción? Bueno, eso hace otro joven que la recuerda. ¡Jeje! ¡Bien, bien!
- Affan: ♪ Rosa, rosita del jardín, haz que mis deseos se cumplan al fin. Una rosa dorada que canta mientras que de entre fragmentos se alza ♪
- Affan: ♪ No hay tierra que me dé sustento, pero esta melodía será mi aliento. La música cargará con mi destino, algún día cumpliré mi sino ♪
- Affan: ♪ Desafiarán a la eternidad, sobrevivirán a mi exigua mortalidad... ♪
- Adiós.
- Affan: Tienes buen corazón, jovencito. Que los Arcontes te protejan a ti y a ese corazón tuyo. Hasta luego.
Historial de cambios[]
Se añadió en la Versión 3.1