Detalles[]
- Habla con Vind.
- Elimina a los monstruos de la torre de vigilancia.
- Habla con Vind.
- Sube a la Torre de Vigilancia.
- Habla con Vind.
Recompensas[]
- Recompensa adicional:
Diálogo[]
- (Habla con Vind)
- Vind *Suspira*, ¿cómo voy a llegar?...
- Vind Oh, hola... ¿qué ocurre?
¿Qué haces?
- Vind Estoy tratando de llegar a la torre de vigilancia del Punto Portatormentas para ver una tormenta se está gestando en el mar.
- Vind Pero más adelante hay un grupo de monstruos bloqueando el camino y no sé cómo pasar.
- Vind No te preocupes, ¡no voy a pedirte que vayas a la torre de vigilancia por mí!
- Vind Es mi deber, y debo cumplir con él sea como sea.
- Vind Probablemente tengas cosas que hacer. No te preocupes por mí, encontraré la manera de hacerlo.
- Paimon Habla como si lo tuviera todo resuelto, pero hay tantos monstruos allá adelante...
- Paimon Vamos, despejemos el área para la Sra. Vind, ¿de acuerdo?
- Paimon Mírala... Está pensando seriamente en correr como alma que lleva el diablo.
Ayudémosla.
- Paimon Las personas de tan buen carácter merecen un poco de ayuda.
¿Crees que se atreverá a ir a la torre ella sola?
- Paimon Eso sería lo peor que podría pasar.
- Paimon No lo permitamos. Vamos, ¡a deshacernos de estos monstruos!
- (Habla con Vind de nuevo)
- Vind Humm... tal vez si corro lo suficientemente rápido pueda llegar a la cima sin lastimarme...
- (Habla con Vind)
- Vind ¿Pasa algo?
Ya no hay monstruos
- Vind ¿De verdad? Oh, gracias al Arconte Anemo...
- Vind Quiero decir... ¡gracias a ti!
- Vind ¿Cómo puedo pagarte? ¡Oh! Lo tengo...
- Vind Ven a buscarme a la cima de la torre de vigilancia. Ahí te espero.
- (Sube a la Torre de Vigilancia)
- Vind Humm... Hoy los mares vuelven a estar tranquilos y no hace viento.
- Vind Mi familia ha vigilado este lugar durante generaciones en nombre de Mondstadt, buscando señales de una tormenta que se avecine. Fue la señorita Vennessa la primera que nos confió esta tarea.
- Vind Desde que Barbatos comenzó a proteger Mondstadt, no hemos visto ni una sola tormenta, y las torres de vigilancia no sirven para nada.
- Vind Aun así, no pienso dejar de venir.
Tu dedicación es admirable.
- Vind Gracias. Pero, a decir verdad, en cuanto a mi deber...
- Vind ... preferiría no tener que cumplirlo nunca.
Qué historia tan triste...
- Vind Sí. Espero que ese episodio no se repita nunca más.
- Vind En fin... Gracias por tu ayuda, estas margaritas voladoras son para ti.
- Vind En el pasado, mi familia observaba cómo crecían las margaritas voladoras para determinar la fuerza del viento de los lugares donde crecían.
- Vind La margarita voladora no puede crecer ni en lugares sin viento ni en lugares con fuertes tormentas.
- Vind Solo puede florecer en lugares como Mondstadt, donde el viento es suave.
- Vind Ojalá sigan creciendo para siempre.