Una canción liviana como la vida es la tercera y última parte de la misión legendaria de la historia de Furina del capitulo Animula Choragi: Acto I - «La pequeña Oceánida».
Detalles[]
- Busca a Vilmant
- Derrota a los monstruos
- Horda 1
- Horda 2
- Sigue dirigiéndote hacia donde está Vilmant
- Busca las pertenencias de la antigua directora del grupo teatral en el Palacio Mermonia
- Lleva de vuelta el diario de la directora
- Encuentra a Neuvillette
- Vuelve al lugar del ensayo para ayudar
- Ve a la Ópera y ayuda con la actuación
- Habla con Furina y con los miembros del grupo teatral
- Vuelve a ver a Dulphy y Lauwick
Recompensas[]
49 200 Mora
60 Protogema
Diálogos[]
- Busca a Vilmant
- Paimon: Paimon no se esperaba que el camino fuera a ser tan complicado, y ahora nos encontramos con otro obstáculo.
- Furina: No te preocupes, con (Viajero) por aquí no tenemos nada que temer. Ni siquiera tendremos que desviarnos.
- Furina: ... Un momento, ¿p-por qué me miran así? No esperarán que yo también pelee, ¡¿verdad?!
- Dulphy: Simplemente, tenemos curiosidad. Creo que nunca te hemos visto pelear.
- Lauwick: ¿Es que no te acuerdas? La Arconte Hydro renunció a todo su poder para convertirlo en indemnitium. Furina misma lo dijo.
- Furina: ¡E-exacto! Jeje... Y ya ni siquiera soy la Arconte Hydro, así que no me queda ni una pizca de poder.
- Furina: Aunque no me guste, me temo que en una situación como esta no soy más que una damisela en apuros.
- Paimon: ¿Y estás orgullosa de ello? Qué poca vergüenza...
Qué le vamos a hacer.
- Furina: ¡Así es! Por desgracia, me veo obligada a observar impotente cómo un aventurero más valiente y experimentado que yo da la cara para salvar la situación.
Tampoco es que haga falta tener poderes divinos para esto. ¿Sabes algo de defensa personal?
- Furina: ¡Oye! Que esto ya es bastante difícil para mí...
- Furina: Perdón, perdón. Me he dejado llevar demasiado. ¿Podrías ayudarnos, por favor?
- Dulphy: Qué lástima, pensé que iba deleitarnos.
- Lauwick: Siento causarles tantos problemas.
- Paimon: No te preocupes, ¡esto es pan comido!
- (Tras derrotar a los enemigos)
- Lauwick: Vilmant, ¿estás aquí?
- Vilmant: ¿Eh? Ah, son ustedes... ¿Qué hace aquí la Srta. Furina?
- Dulphy: Deja que te lo explique. Solo faltas tú.
- Dulphy le explica a Vilmant todo lo ocurrido.
- Vilmant: Entonces, ¿creen que averiguar la verdad sobre la desaparición de la directora ayudaría a escribir un final satisfactorio para todo el mundo?
- Vilmant: *Suspira*, el éxito de la obra me preocupa tanto como al resto. Por eso quería esperar hasta después de la actuación.
- Vilmant: De lo contrario, quién sabe si tan siquiera tendríamos otra oportunidad de subir juntos al escenario.
- Pauleau: Huir de la verdad no sirve de nada, Vilmant.
- Pauleau: A menos que la muerte de Aurélie tenga algo que ver contigo.
- Vilmant: No quiero hablar de eso.
- Pauleau: Escucha, Vilmant. Yo pensaba que lo que sentía por Aurélie era algo de lo que avergonzarme, y por eso nunca dije nada a nadie...
- Pauleau: Pero ahora me he decidido y estoy dispuesto a contárselo a todos. Estoy listo para sacrificarme y enfrentarme a lo que haga falta.
- Pauleau: «La pequeña Oceánida» nunca estará completa hasta estar en paz con lo que siento por Aurélie.
- Vilmant: ... *Suspira*, por eso la gente dice que no eres el inteligente.
- Vilmant: Como todos sabrán, el grupo no se ha mantenido a flote gracias a la venta de entradas, sino a las donaciones del público. Por supuesto, eso no era ni de lejos suficiente...
- Vilmant: Hacíamos trabajos a tiempo parcial cuando no actuábamos, pero aun así, la situación económica del grupo era bastante precaria...
- Vilmant: Así que un día, al terminar de actuar, un comerciante vino y nos ofreció un gran patrocinio a cambio de ofrecer su bebida al público durante las actuaciones.
- Vilmant: Parecía un trato beneficioso para ambas partes, así que acepté sin consultarlo con la directora. Pero cuando el comerciante vino a entregarnos las bebidas me di cuenta de que...
- sinte. Vilmant: La bebida en cuestión... era
- Furina: ¿N-no es esa la bebida que vendía el culpable del caso de las chicas desaparecidas?
Recuerdo que inducía a un estado de euforia.
Recuerdo que era muy nociva para la salud.
- Vilmant: Me asusté al ver las cajas y fui a contarle todo a la directora. Ella también estaba muy sorprendida.
- Vilmant: Pero no me culpó por haber tomado la decisión sin consultarle previamente. En vez de eso, contactó con el comerciante y le dijo que el grupo teatral no podía aceptar la colaboración.
- Vilmant: El comerciante dijo que no podíamos retractarnos y nos demandó solicitando una compensación muy elevada a la cual, evidentemente, no podíamos hacer frente...
- Pauleau: ¿Y entonces?...
- Vilmant: Quería resolverlo yo mismo, pero la directora me detuvo. Dijo que era problema del grupo teatral, y que no era mi culpa.
- Vilmant: Pero las cosas solo empeoraron desde entonces. El comerciante era cada vez más insistente, hasta que llegó un día en el que la directora nos dijo sutilmente que nos fuéramos de la ciudad. En ese momento, supe a qué se debía.
- Vilmant: Lo admito, todo aquello fue por mi culpa. No me atreví a contárselo a nadie en aquel entonces, y tras la desaparición de la directora, me atrevía aún menos.
Este asunto hizo que fueran tras la directora.
Este asunto les dio un móvil.
- Vilmant: Sí, Aurélie murió por mi culpa. ¿Contento?
- Dulphy: Oye, no digas eso.
- Pauleau: ¡Maldito! ¡Sabías que Aurélie corría peligro! ¡¿Por qué no nos dijiste nada?!
- Pauleau: Llegados a ese punto, ¿de qué tenías miedo? ¡Teníamos que haber ido a salvarla!
- Pauleau: ¡¿Cómo se puede ser tan estúpido?!
- Lauwick: Cálmense, cálmense...
- Paimon: ¡Sí, eso! ¡Deben tranquilizarse!
- Pauleau: ¿Que me calme? ¿Cómo quieren que me calme? ¡Aurélie ha muerto por culpa de este tipo! ¡Ella era el amor de mi vida!
- Pauleau: ¡Y te atreves a decir que lo mantuviste en secreto por el bien de la obra, cuando claramente no te atrevías a hacerte responsable de lo que hiciste!
- Vilmant: Lo siento. Llevo tiempo queriendo disculparme con todos. Pero si la directora no está, ¿de qué iban a servir mis disculpas?
- Vilmant: Soy un cobarde que cometió un terrible error irremediable. Denme una paliza si quieren, o mátenme. Me lo merezco.
- Vilmant: ¡Acaben con mi vida! ¡Así podre ver a la directora y disculparme ante ella!
- Pauleau: ¡Fuera de mi vista! ¡Vamos, largo! ¡No quiero volver a verte nunca más!
- Furina: ¡Suficiente! Llevan mucho rato gritándose y diciéndose de todo. ¡Déjenlo ya!
- Furina: ¿Pueden no mezclar sus problemas personales con los del grupo teatral?
- Furina: No paran de decir que quieren rendir tributo a su directora con su última actuación, pero ¿cómo van a hacerlo si no hacen más que usarlo como pretexto para desquitarse?
- Pauleau: ... Tienes razón.
- Vilmant: Lo siento.
- Furina: En el escenario, quien tiene la mayor parte de la atención del público es el protagonista, y ustedes ya estaban acostumbrados a ver a su directora como el corazón de su grupo.
- Furina: Pero, cuando vivía, estoy segura de que su mayor deseo no era ser el centro de atención... Puedo apreciar cuánto los quería a todos, y cuánto amaba el grupo de teatro.
- Furina: Ella quería construir un hogar acogedor para sus hermanos y hermanas, un refugio con el que protegerlos. Así es como deberían recordarla, y lo que hay que rememorar.
- Furina: Ella ya era la heroína de su historia, ¿no creen?
- Lauwick: Tienes razón.
- Furina: Así que piensen bien en lo que eso significa. Y luego, piensen si su discusión tiene sentido.
- Furina: Si tanto se odian y no son capaces de ponerse de acuerdo, entonces lo mejor es que lo dejen ahora. ¿Para qué hacer una actuación final si el grupo ya está roto?
- Furina: Pero no pueden hacer eso, por Aurélie y por el hogar que ha construido para todos ustedes.
- Dulphy: Jeje.
- Furina: ¿De qué te ríes? ¿Es que he dicho algo gracioso?
- Dulphy: Perdón, no lo hice con esa intención. Es solo que... por un momento, he sentido como si la directora estuviera con nosotros.
- Dulphy: Si hubiera presenciado la escena de hace un momento, nos habría regañado de la misma forma.
- Paimon: ¿De verdad? Paimon pensaba que era una persona amable.
- Dulphy: Por supuesto que lo era. Incluso sus peores regañinas venían desde la amabilidad. Era una persona excepcional.
- Pauleau: Tus palabras... han sido muy reveladoras.
- Vilmant: Lo siento mucho. Quería disculparme, de verdad, pero... acabé consiguiendo el efecto contrario.
- Lauwick: Bueno, dejemos todo esto para después de la actuación.
- Paimon: Entonces, ¿qué hacemos con el final?
- Furina: Está claro que necesitan separarse temporalmente del escenario y fijarse en lo que han pasado por alto entre tantas emociones.
- Furina: El final de la historia debe centrarse en Aurélie. Ella es la verdadera protagonista.
Quizá podamos aprender más sobre ella.
- Paimon: ¿Qué quieres decir?
- Furina: Cierto. Cuando estuvieron bajo el agua investigando en aquella base de sinte, recuperaron algunas de las pertenencias de las víctimas del caso de las chicas desaparecidas
- Furina: Si encuentras alguna de sus pertenencias... quizás podamos hacernos una mejor idea de cómo se sentía en aquel entonces.
- Pauleau: ¿Eso es posible?
- Furina: Supongo que nadie estará en contra de que el final de la actuación esté basado en los verdaderos sentimientos de Aurélie.
- Vilmant: No...
- Lauwick: Bueno. Entonces, lo dejamos en sus manos.
- Furina: En marcha. Vamos al Palacio Mermonia a echar un vistazo. Los demás, regresen al lugar en el que suelen ensayar y esperen nuestras noticias.
- (Acércate a Sedènne en el Palacio Mermonia)
- Sedènne: ¿Quieren revisar algunos de los objetos recuperados de las víctimas del caso de las chicas desaparecidas? Pero... ese caso lleva tiempo cerrado.
- Sedènne: Pero bueno, ustedes fueron quienes hallaron y facilitaron las pruebas, así que no será necesario solicitar autorización. Denme un momento, yo me encargo.
- Sedènne le pide a alguien que saque la caja con las pertenencias de Aurélie.
- Furina: Así que esto es lo que llevaba Aurélie encima cuando desapareció... Aparte de sus pertenencias, solo hay un cuaderno viejo.
- Paimon: Está lleno de líneas del guion... y también de esbozos. Parece que muestran dónde debería colocarse el atrezo en el escenario.
- Furina: Déjame ver. Quizá haya alguna pista sobre algo tras su desaparición.
- Furina: ¡Ajá! ¡Lo tengo! “Para quien encuentre este diario”... Veamos.
- Furina: Parece que estuvo registrando de forma detallada las acciones de su secuestrador. Incluso habla de la verdad tras los experimentos y la disolución de las chicas.
- Vacher. Furina: Si hubiéramos tenido la oportunidad de examinar este cuaderno con detenimiento anteriormente, habría sido una prueba de cargo concluyente contra
- Paimon: Vacher arrebató tantas vidas...
- Furina: Supongo que Aurélie escribió todo esto con la esperanza de que un día sirviera de ayuda a los investigadores.
- Furina: Espera, está cortado por aquí...
¿Pasa algo?
- Furina: Su caligrafía se vuelve cada vez más ligera y frágil. Supongo que se encontraba cada vez más débil.
- Furina: Sus últimas palabras son... Bueno, mejor léanlas ustedes mismos.
- Has leído las notas de Aurélie...
- Paimon: Estaba muerta de miedo...
Vio como una chica se disolvía ante sus ojos...
Esperó su muerte en silencio...
- Furina: Para el grupo de teatro era toda una heroína, pero al final no dejaba de ser humana.
- Furina: Me cuesta imaginar el dolor y la soledad que debió de haber pasado en sus últimos días...
- Furina: Espera, lo que pone en la última página me resulta familiar...
- Furina: “Si te conviertes en humana, no podrás revelarle tu secreto a nadie. Sufrirás y estarás sola... ¿Es eso lo que quieres?”.
- Paimon: ¿Esa no es la frase más importante de «La pequeña Oceánida»?
- Furina: “Porque soy su hermana mayor”.
- Paimon: Oh...
- Furina: No se arrepintió. Incluso mientras esperaba morir en silencio.
- Furina: Esta debe de ser la respuesta que más le gustaría oír a los miembros del grupo.
- Furina: Volcaron toda su confianza, admiración y amor en una gran persona.
- Furina: Vamos. Contémosles cuáles fueron los últimos pensamientos de Aurélie.
- Entra al lugar del ensayo
- Al terminar de leer el cuaderno, algunos se quedaron en silencio, otros lloraron, y otros apretaron sus dientes con rabia...
- Tras un buen rato, el grupo se calma y se intenta poner de acuerdo.
- Pauleau: Ella merece el final de un héroe. Si esa es la única forma de transmitir al público el valor y el desinterés que demostró ante la muerte, entonces tiene sentido que la historia termine de esta forma.
- Lauwick: Incluso en los últimos momentos de su vida, dejó pistas importantes para que otros pudieran seguirlas.
- Dulphy: Hizo lo que pudo para proteger a todos los que pudiera, aunque eso implicara sacrificarse...
- Dulphy: Creo que no hace falta seguir discutiendo sobre qué decisión tomaría nuestra “pequeña Oceánida”.
- Dulphy: ¿Y bien, Vilmant? ¿Crees que puedes dejar el pasado de lado y seguir actuando?
- Vilmant: ... Volcaré mi arrepentimiento y mis disculpas en el escenario, y daré mi mejor actuación por ella.
- Vilmant: No necesito que me perdonen, y tampoco hace falta que se preocupen por mis sentimientos. Esta actuación final es para la directora.
- Furina: Parece que todos están de acuerdo. Tengo la sensación de que será una actuación sin precedentes.
- Paimon: Pero si no los has visto actuar, ¿cómo puedes estar tan segura?
- Furina: Jeje, no subestimes mi experiencia. He visto incontables obras musicales, y he aprendido algo importante.
- Furina: Si quieres conmover al público con tus canciones, debes entregarte y meterte en el papel para transmitir toda la emoción posible con tu actuación.
- Furina: ¿Y no son las emociones humanas, como el amor y el odio, lo más maravilloso del mundo?
- Furina: Estoy segura de que nadie quiere interpretar esta obra a la perfección más que ellos.
- Dulphy: Gracias, Furina. Gracias por apoyarnos.
- Pauleau: Entonces, no perdamos más el tiempo. Hablemos de los detalles del final y decidámoslo lo antes posible.
- Dulphy: Antes de eso, tengo una propuesta.
- Dulphy: Cuando finalice la obra, por favor, permítanme utilizar el nombre de la directora en vez del mío.
- Lauwick: ¿Eh? Pero entonces...
- Dulphy: Después de todo, originalmente mi personaje lo iba a interpretar ella. Solo estoy sustituyéndola.
- Dulphy: Una protagonista tan emblemática debe hacer justicia a su nombre.
- Pauleau: Bueno, si a ti no te importa, a mí tampoco.
- Furina: Jeje, ¡este es el ambiente que debería haber en un grupo de teatro!
- Furina: Entonces, dejo en sus manos todo lo que tenga que ver con la actuación. Háganlo lo mejor que puedan. Yo me encargo de preparar el escenario.
- Paimon: ¿Preparar el escenario?
- Lauwick: Ah, no te preocupes. No tenemos que reservar en el lugar donde solemos actuar.
- Furina: No, no. ¿Qué estás diciendo? Un escenario normal no basta. Una obra como esta debe representarse en la Ópera de la Epíclesis.
- Dulphy: Espera... ¿Qué?
- Vilmant: No... no importa cómo lo digas, ese sitio es demasiado lujoso para nosotros.
- Furina: ¿De qué tienen miedo? ¿Es que creen que la historia de Aurélie no se merece el mejor de los escenarios?
- Vilmant: Bueno, no quería decir eso...
- Paimon: Es su última actuación, ¿verdad?
Crean en ustedes mismos.
¡Hay que ir a lo grande!
- Dulphy: Por mí no hay problema. ¿Y por ustedes?
- Dulphy: Jaja, ¡me tomaré su silencio como un sí! Gracias por esta oportunidad. Es como un sueño hecho realidad.
- Furina: ¡No me decepcionen!
- Furina: Si fracasan, me afectará a mi también.
- Furina: Bien, vamos. Primero, tendremos que hablar con Neuvillette. Sé dónde puede estar.
- Encuentra a Neuvillette
- Furina: ¿Ves? Al final he acertado con mi suposición.
- Paimon: ¡¿Qué?! ¡¿No estabas segura?!
- Furina: Sabía que estarías aquí.
- Neuvillette: Solo estoy descansando un poco. Hace tiempo que no te veo, Furina. Y a ustedes también, viajero y Paimon. ¿Qué les trae por aquí?
- Furina: Me gustaría reservar la Ópera. Verás...
- Comparten con Neuvillette la historia que hay tras «La pequeña Oceánida».
- Neuvillette: Ya veo... Aunque el proceso para reservar la Ópera de la Epíclesis es bastante complicado, ya que son ustedes tres quienes lo solicitan, no veo razón para ponérselo más difícil con formalismos.
- Neuvillette: La historia de «La pequeña Oceánida» es fascinante. Espero con ansias el día de la actuación.
- Neuvillette: Sin embargo, he de decir que no esperaba que fueras a reavivar la llama de la pasión por la actuación tras lo ocurrido.
- Furina: ¿Eh? ¿Te parezco emocionada?
- Neuvillette: Sí, y es la primera vez que te veo desde que dejaste tu puesto anterior.
- Furina: Me sentía un poco culpable por no ayudarlos, así que quise aprender un poco más... Todavía no sé cómo ha acabado así todo esto.
- Furina: Antes, nos sentábamos en los asientos en lo alto de la sala, dando nuestra opinión sobre casos aislados, pero resultaba difícil ver las historias cargadas de emoción que había tras cada caso.
- Furina: Quizá sea el hecho de que me haya costado tanto convertirme en una persona normal lo que me hace sentir tanta curiosidad por sus vidas.
- Neuvillette: Me alegro mucho de que hayas podido recuperarte.
- Neuvillette: Ahora que has recobrado algo de confianza, ¿tienes pensado volver al escenario?
- Furina: ¿Por qué me preguntas eso tan de repente?
- Neuvillette: Si «La pequeña Oceánida» resultara ser un éxito, se convertirá en una obra clásica y otras compañías teatrales no tardarán en añadirla a su repertorio.
- Neuvillette: Las elecciones y la experiencia de la protagonista, Clío, te tienen a ti como modelo. Naturalmente, eso te convierte en una de las actrices más adecuadas para el papel.
- Neuvillette: Sería una pena desperdiciar esta oportunidad para que el público pueda disfrutar una vez más de tu talento para la actuación.
- Furina: Creo que he sido suficientemente clara. No volveré a actuar, sin excepciones.
- Furina: Y tampoco creo que sea ninguna pena. Nunca faltan actores con talento o historias conmovedoras.
- Furina: Es igual que con esta experiencia. Siento que he aprendido mucho, por lo que ya ha merecido la pena el precio de la entrada.
- Furina: Incluso siento un poco de envidia de que puedan despedirse de su pasado de una forma tan majestuosa y grandiosa.
- Neuvillette: Ya veo. Así que estás disfrutando de un nuevo “escenario”. Me tranquiliza.
- Neuvillette: Espero sinceramente que el espectáculo tenga el final que merece. Pediré que reserven el día y que envíen la documentación pertinente al grupo teatral tras confirmar la reserva.
- Paimon: ¡Gracias, Neuvillette!
- Neuvillette: No hay de qué.
- Lleva de vuelta el diario de la directora
- Furina: ¡Misión cumplida! No ha habido ningún problema.
- Furina: ¡Tras escuchar mi discurso apasionado y elocuente, su señoría Neuvillette accedió a ofrecernos el escenario para esta actuación tan especial!
- Furina: Aunque hemos tenido que luchar cada paso del camino para conseguir esta oportunidad, al fin hemos reunido todos los ingredientes para realizar una gran actuación.
- Furina: ¡Una historia emotiva, un escenario majestuoso y unos actores apasionados!
- Furina: ¡Esforcémonos como equipo, y demos lo mejor de cada uno!
- Dulphy: Jeje, qué alegría.
- Pauleau: Cuanto antes acabemos el final, más tiempo tendremos para ensayar.
- Pauleau: He discutido algunas partes con Vilmant y creo que podemos hacer que sean más conmovedoras para el público.
- Paimon: Guau, ¿ustedes dos han tenido una conversación constructiva? ¡Qué bien!
- Vilmant: La comunicación es esencial para cualquier actuación.
- Lauwick: *Suspira*, míranos. Hace unos días no me habría podido imaginar que estaríamos como estamos ahora.
- Paimon: ¡Qué bien! Aunque Furina esté siendo un poco dramática, ha conseguido animar a todo el mundo.
Estoy deseando ver la obra.
- Lauwick: Por favor, siéntanse libres de hacernos cualquier sugerencia. Su opinión es muy importante para nosotros.
- Dulphy: Vamos, Lauwick. Tenemos que ensayar la apertura.
- (La representación comienza en la Ópera de la Epíclesis. Vilmant interpreta el papel de Ciamaca, el jefe del pueblo, mientras que Pauleau interpreta el papel de Perroux, el amante de Clío)
- Ciamaca: ¡Maldita Clío! ¡Se ha llevado el agua de la vida! ¡Es un fraude y debe pagar por sus crímenes!
- Perroux: ¡Esto no tiene nada que ver con ella! La ignorancia y el odio de nuestra gente tienen la culpa. ¿Cómo vamos a conseguir recuperar el agua en estas condiciones?
- Ciamaca: Este tipo podría sernos de utilidad... ¡Aprésenlo! ¡Así haremos que Clío dé la cara!
- Perroux: ¡Abandona este lugar, oh, pequeña Oceánida, y no regreses más!
- Furina: Están todos muy metidos en sus papeles. Hacía tiempo que no veía una actuación tan bella.
- Furina: *Suspira*, pero...
- Paimon: ¿Qué hacemos? Ya casi es su hora.
- Dulphy: *Tch*, ¿por qué precisamente ahora?...
- Lauwick: Hey, ¿qué pasa? Te toca salir enseguida...
- Lauwick: Oh, no. Otra vez no... Pero ¿por qué? ¿Qué pasa con ese nuevo medicamento? ¿Ya no te hace efecto?
- Dulphy: El medicamento ha ido teniendo menos efecto progresivamente, así que no he tenido más remedio que aumentar la dosis...
- Lauwick: ¿Qué? Entonces, ¿no es una cura, sino que solo alivia los síntomas?
- Dulphy: Hay que terminar la actuación, cueste lo que cueste...
- Lauwick: ¿Cómo puedes hacerte esto? ¡Y después del sermón que me diste sobre no cuidar mi salud!
- Dulphy: ... Lo siento. Los he defraudado a todos.
- Lauwick: Tú... *Suspira*. No es el momento de discutir. ¿Cómo va a continuar la función sin la protagonista?
- Dulphy: ...
- Dulphy: Furina... quiero pedirte un favor.
- Furina: Está bien. Estás enferma, descansa. Sé lo que me vas a pedir.
- Furina: Lauwick, tu personaje no tiene más escenas, ¿verdad?
- Lauwick: Ah, eh... Así es. Creo que no me quedan más escenas, aunque todavía me queda una línea, pero puedo pedirle a otro miembro del grupo con una voz parecida que la diga. ¿Por qué?
- Furina: Por favor, lleva a Dulphy de vuelta para que descanse. Yo cantaré en la escena final.
- Furina: ... *Suspira*. Al final, se han dado así las cosas...
- Dulphy: Gracias, Furina... Y siento que vayas a traicionar tus principios por mi culpa...
- Furina: No te preocupes, son cosas que pasan. En todo caso, sería culpa mía por meterme de lleno en el asunto, jeje.
- Furina: Nadie quiere tener remordimientos, yo incluida.
- Furina: Déjamelo a mí. Te he visto ensayar tantas veces que ya me sé la parte de Clío de memoria.
- Dulphy: No dudo de tus habilidades interpretativas, pero esta actuación está dedicada a la vida y legado de la directora, así que déjame preguntarte algo...
- Dulphy: En tu opinión, ¿cuál es la razón por la que Clío brilla tanto?
- Furina: ... Es por la pureza de su corazón.
- Furina: A pesar del dolor y la soledad que tuvo que soportar... Nunca dudó de la belleza del mundo.
- Dulphy: Bien dicho.
- Dulphy: Dejo a la directora Aurélie en tus manos.
- En el acantilado se encontraban muchos aldeanos emocionados. El jefe de la aldea se situaba en el centro mientras Perroux estaba a un lado, de rodillas y atado.
- Furina debuta como Clío y comienza a cantar.
- A pesar de las falsas acusaciones contra Clío, esta no odia a los humanos. Su elección es volver al agua para dirigir el flujo de agua a voluntad y así estar siempre cerca de los humanos.
- Al final, Clío se dirige lentamente hacia la playa. Desde el cielo desciende una Visión. Sonrió levemente y, sin recogerla, la Visión que acababa de nacer cae solitaria al agua...
- Veillas: ¿Es cosa mía o... la que está en el escenario es la Srta. Furina?
- Gignac: Lleva muchísimo tiempo desaparecida, y ahora aparece de la nada.
- Gignac: Sin embargo, he de decir que sus habilidades interpretativas siguen siendo tan formidables como siempre.
- Pauleau: Clío, la pequeña Oceánida. Representada por Aurélie Fumeau.
- Veillas: Espera, ese es su nombre. ¿Qué está pasando?
- Gignac: No sé. ¿Tal vez solo se parezcan mucho?
- Furina: (Llevo mucho tiempo fuera de los focos, y tampoco han utilizado mi nombre en la presentación. Espero que no me reconozca mucha gente...)
- Furina: (Aunque es una lástima que tenga que romper la única regla que me ha costado tanto imponerme.)
- Furina: (Sin embargo, he de admitir que después de todo...)
- Furina: (... Me alegra estar de nuevo en el escenario.)
- Pauleau: Por último, nos gustaría dar un agradecimiento especial a nuestra asesora teatral y coordinadora, ¡la Srta. Furina!
- Furina: ¡Oye! ¡Esto no fue lo que acordamos!
- Veillas: ¡Mira! ¡Al final resulta que sí que era Furina!
- Gignac: ¡Ha vuelto!
- Furina: ¡Aaaah! En serio... ¡¿Y sin decírmelo antes?!
- (Entre bastidores, después del saludo final)
- Pauleau: Bueno, no te enfades. Fue decisión del grupo. Solo queríamos que tu contribución no quedara sin reconocimiento alguno.
- Pauleau: Hay una antigua norma en Fontaine que dice que hay que reconocer el trabajo de cualquiera, tanto en el escenario como fuera de él.
- Furina: Sí, la conozco, pero... pero... *Suspira*, ¡también depende de la situación! ¡No estaba preparada!
- Paimon: Jeje, Paimon cree que tampoco es para tanto.
Como mucho, te pedirán algún que otro autógrafo.
- Furina: ¿Ah, sí? Pues si es tan sencillo, puedes ayudarme a firmarlos.
- Paimon: Más que hablar de esto, ¿no deberíamos hablar de lo que acaba de ocurrir? A Paimon casi le da un infarto.
- Paimon: Paimon voló hasta donde debía y estaba a punto de soltar la Visión de atrezo cuando, de repente, ¡apareció una de verdad!
- Furina: Ah, eso...
- Furina: No sé qué pasó, pero al menos el resultado fue magnífico.
- Furina: Apuesto a que el público nunca había visto un atrezo tan realista.
- Pauleau: Por cierto, ¿qué hay de Dulphy? Me pregunto cómo estará.
- Vilmant: Vayamos a ver cómo está nada más terminar de recoger el escenario.
- Furina: Sí. Además, seguro que quiere saber cómo ha ido el espectáculo.
- Furina: En cualquier caso, se puede decir que hemos cumplido con el objetivo propuesto.
- (Habla con Kirimoto, opcional)
-
- Kirimoto: ¿Alguien ha visto a Furina? Me gustaría que me firmara un autógrafo, pero no sé dónde está...
- (Habla con Sabine o Tussaud, opcional)
-
- Sabine: La actriz que hacía de Clío cantaba muy bien... ¿Por qué la habrán cambiado al final?
- Tussaud: Ni idea. ¿Tal vez sea parte del guion?
- (Habla con Connie o Evra, opcional)
-
- Connie: No me esperaba una actuación tan increíble de un grupo de teatro tan poco conocido. Se han comido el escenario.
- Evra: Sí. Aunque técnicamente hablando pueden mejorar algunas cosas, la actuación en general ha sido muy emotiva. Creo que tardaré en olvidarla.
- (Ingresa al lugar de ensayo)
- Lauwick: Ah, ya han vuelto.
- Lauwick: Se encuentra bien. Después de tomar la medicación original, la enfermedad se estabilizó. Sin embargo, según mi experiencia diría que tiene que descansar un par de días.
- Dulphy: ¿Cómo fue la actuación? ¿Ha ido bien? ¿A la gente le gustó?
- Paimon: No te preocupes, todo fue a pedir de boca. No vas a creer lo que pasó mientras Furina estaba en el escenario... Supongo que podrás leer sobre ello mañana en «El Pájaro de Vapor».
- Dulphy: Me alegro...
- Dulphy: Lo siento. No pude salir al escenario al final. Parece que no debí haberme forzado desde un principio.
- Furina: No te preocupes. Como me dijeron tras nombrarme al final de la función, el trabajo de toda persona debe ser reconocido.
- Furina: Incluso si al final no pudiste actuar como hubieras deseado, el público apreció mucho tu actuación. Tu actuación ha sido muy importante en este espectáculo conmemorativo.
- Dulphy: Mhm. Bueno, al menos lo hemos conseguido.
- Dulphy: Desde que nací, nunca he tenido muy buena suerte, así que no suelo esperar que las cosas vayan bien en la vida. Por eso, estoy más que satisfecha con haber podido terminar de esta forma.
- Lauwick: ¿Otra vez echándole la culpa a la suerte? Tal vez si no hubieras sido tan imprudente en el pasado, no estarías recayendo constantemente.
- Dulphy: Ah, no empieces otra vez. No tengo fuerzas para discutir contigo...
- Paimon: Jeje, se nota que se aprecian mucho el uno al otro.
- Lauwick: Hum, no sé de qué me hablas.
- Dulphy: Querrás decir que se nota que nunca dejamos de discutir.
- Furina: Bueno, ¿y qué piensan hacer ahora?
- Furina: Tras su brillante actuación, la reputación del grupo teatral no tardará en extenderse como el agua por Fontaine. No creo que tengan que disolver el grupo.
- Furina: Pueden aprovechar la gran respuesta que ha causado en el público y transmitir los derechos de representación de «La pequeña Oceánida» a otros grupos teatrales profesionales. Su situación financiera mejoraría enormemente.
- Dulphy: No. Creo que deberíamos disolver el grupo igualmente.
- Lauwick: Sí, eso fue lo que acordamos.
- Vilmant: Yo tampoco creo que deba quedarme más tiempo con ustedes. Nos vemos, si el destino quiere.
- Paimon: ¡Oye! ¡No te vayas tan rápido!
- Pauleau: A mí me gustaría seguir actuando, así que quizás busque otro grupo teatral.
- Pauleau: Tras presenciar la actuación de Furina, creo que empiezo a entender por qué a la directora le fascinaban tanto los musicales.
- Dulphy: Jeje, deberías hacerlo. Yo también pensaba en continuar, pero... no sé si mi estado de salud me lo permitirá.
- Lauwick: Vaya, parece que por fin has ordenado tus prioridades... *Suspira*, supongo que podré esperar hasta que estés recuperada.
- Lauwick: ¿Qué hay de ti, Furina? ¿Tienes algún plan en mente?
- Furina: Para ser sincera, no creo que volver a desaparecer sea una opción viable. Supongo que acabaría viniendo bastante gente a llamar a mi puerta en busca de orientación, y eso sería agobiante.
- Furina: Y todo gracias a ese “agradecimiento especial” del final.
- Pauleau: Perdón...
- Furina: No pasa nada, no tienes que disculparte. Lo que quiero decir es que... puede que, después de todo, no esté tan mal regresar al escenario como había imaginado.
- Furina: Puede que Neuvillette tuviera razón y el papel de Clío fuera adecuado para mí.
- Furina: Sigo sin querer fingir ser otra persona, pero tengo el deseo de expresarme... Así que puede que este sea mi nuevo “escenario”.
No hace falta separar tanto las cosas.
Haz lo que te apetezca y te haga feliz.
- Furina: Sí. Solía ser una actriz enmascarada que solo pretendía ocultar la verdad...
- Furina: Pero, a partir de ahora, quiero aprender historias reales sobre gente de verdad.
- Furina: Quiero ver cómo florecen, cómo se marchitan y cómo se refina un guion que será recordado en la posteridad.
- Furina: Estoy segura de que esto también le resultaba fascinante a Aurélie.
- Paimon: Parece que ya no te resistes tanto.
- Paimon: Cuanto más recorres el mundo, más descubres sobre lo fascinante que es.
La próxima vez, te invitaré a que me acompañes.
- Furina: Jeje, trato hecho.
- Furina: Si una Visión es un regalo de los dioses...
- Furina: Entonces, no puedo desaprovecharlo.
- (Habla con Furina, opcional)
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- Furina: Es irónico pensar en todo el tiempo que llevo anhelando recibir un poder como este.
- Furina: Y ahora que dispongo de este regalo de los dioses, por fin siento que mi destino está en mis manos.
- Furina: ¿Así es como se sienten los humanos?
- (Habla con Dulphy o Lauwick, opcional)
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- Dulphy: Yo también me arrepiento de ciertas cosas, pero...
- Lauwick: En el futuro tendremos muchas oportunidades de representar en el escenario nuestras propias historias.
- (Habla con Pauleau, opcional)
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- Pauleau: Solo estoy terminando de recoger mis cosas. En cuanto lo tenga todo listo, asistiré a una entrevista con «El Pájaro de Vapor».
- Pauleau: Gracias por su ayuda. Sin ustedes no habríamos conseguido una actuación tan perfecta.
- Pauleau: Pero lo que más les agradezco es que me dieron la oportunidad de despedirme de Aurélie.
- (Hablar con Buraud, opcional)
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- Buraud: Ahora que me he relajado, siento que me voy a desmayar de un momento a otro.
- (Habla con Elain, opcional)
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- Elain: Muchas gracias. Siento que he recuperado la motivación que tenía cuando acababa de unirme al grupo.
- Elain: Quizá sea demasiado tarde, pero al menos esta ha sido una experiencia inolvidable.
Galería[]
Story Teaser- La vaguelette - Genshin Impact
Avance de la trama de Genshin Impact - La vaguelette
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Se añadió en la Versión 4.2