Que el viento te guíe es la cuarta parte de las Misión de Arconte del Prólogo: Acto II - Por un mañana sin lágrimas.
Detalles[]
- Ve a Levantaviento
- Habla con Venti
- Derrota a los adversarios que se aproximan
- Habla con Venti
Recompensas[]
Diálogos[]
- (Habla con Venti)
- Venti: ¿Eh? ¿Qué hacen aquí?
- Venti: Bueno, en realidad supuse que me seguirían...
Quisiera saber más sobre el dios Anemo.
- Venti: ¿Te refieres a Barbatos, el dios del Viento? Desapareció hace tiempo de Mondstadt.
- Venti: El Arconte Geo de Liyue y la Arconte Electro de Inazuma todavía están por ahí, pero ha pasado mucho tiempo desde la última vez que la gente de Mondstadt vio a su propio dios.
- Venti: ¿Por qué preguntan sobre el dios Anemo? ¿Tiene que ver con Dvalin?
- Paimon: Bueno... pues... es que los dioses...
Nos han contado sobre el pasado del dragón.
- Venti: ¿Qué piensa la gente de "Stormterror"? Me da curiosidad.
- Venti: No hay prisa. No tienes que decírmelo ahora.
- Venti: Hace mucho que no venía. Parece que algunos no están muy contentos con mi llegada.
- (Un ojo de la tormenta aparece)
- Paimon: El viento... No puedo abrir... los ojos...
- Paimon: ¡Ese tipo de criaturas no debería aparecer con una simple brisa!
- Paimon: ¿Crees que estaba siguiendo a esa persona de verde?
- Paimon: Viajero... Parece que esa persona tiene una conexión más profunda que tú con el elemento Anemo.
- (Después derrotar al enemigo)
- Venti: Humm... Parece que el dragón no fue lo único afectado por este cambio en el aire...
- Venti: ¿Decías que alguien te habló sobre el dragón?
- (Le contaste a Venti el asunto del que te habló Lisa...)
- Venti: Ya veo... ¿Así es como lo ve Lisa, la erudita de Mondstadt?
- Venti: Pues no se equivoca. Si hemos llegado a esto, es porque ambas partes han acudido al uso de la fuerza.
- Venti: Pero la ira de Stormterror no fue causada porque la gente dejara de dar ofrendas a los Cuatro Vientos.
- Venti: Ni es un odio natural, sino consecuencia de su degradación.
- Paimon: ¿Degradación?
- Venti: La sangre oscura que corre en sus venas lo ha torturado por años.
- Venti: Eso es lo que permitió que perdiera el camino y se dejara engañar por el Mago del Abismo.
¿Mago del Abismo? No me suena ese nombre...
- Venti: Pertenecen a la Orden del Abismo, formada por seres que no son humanos. Desprecian a la humanidad.
Creo que oí hablar de ellos en Mondstadt...
- Venti: Así es. Pertenecen a la Orden del Abismo, formada por seres que no son humanos. Desprecian a la humanidad.
- Venti: No sé de dónde vienen. Solo sé que tienen un profundo desprecio por el mundo de los humanos.
- Venti: Muchos Hilichurls salvajes siguen sus órdenes y actúan como sus armas.
- Venti: Antes de venir aquí, yo también estaba maldito, corrompido y abandonado a mi suerte.
- Venti: Pero ahora, ante nosotros se encuentra el símbolo de la heroína de Mondstadt, el lugar en que la ciudad fue erigida.
- Venti: El viento que acaricia sus ramas es tan suave y su aroma es tan embriagador.
- Venti: Al estar contigo bajo la sombra de este árbol, me siento como cuando purificaste la lágrima. Es como si el veneno desapareciera de mi cuerpo...
- Venti: ¡Ah! Me siento mucho mejor.
- Paimon: Entonces... ¿cómo te envenenaron?
- Venti: Intenté hablar con Dvalin, pero alguien me interrumpió...
- Venti: Al final, no solo no pude eliminar la maldición de Dvalin, ¡sino que también me envenené a mí mismo!
Oh... Pues...
¿Yo te envenené?
- Venti: ¡Correcto!
- Venti: Así que, como compensación, Viajero, ¡vendrás conmigo a la Catedral!
- Paimon: ¿A la Catedral de Mondstadt? ¿Y a qué vamos?
- Venti: A recuperar la Der Himmel, la Lira Sagrada.
Historial de cambios[]
- Versión 1.0
- Que el viento te guíe se añadió al juego.