Proyección astral es la cuarta parte de la Misión legendaria de la historia de Xiao: Alatus Nemeseos, Acto I: «El sueño de la mariposa».
Detalles[]
- Llega al santuario que está al sur de la Cordillera Tianheng
- Habla con el guardián del templo
- Recoge el incensario para el ritual
- Regresa a buscar a Pervases
- Recolecta las flores de neblina para el ritual
- Ve a las Estatuas Yaksha de noche
- Habla con Xiao
- Lleva a cabo la ceremonia en el orden adecuado
- Dispara al punto luminoso de las dos
- Estatuas Yaksha
- Castiga el alma del falso Adeptus
- Dirigete a la Posada Wangshu y pregunta a Verr Goldet sobre el falso
- Habla con Xiao y devuélvele el Sello del Permiso
Recompensas[]
38 100 Mora
60 Protogema
Diálogos[]
- (Habla con el guardián del templo)
- Paimon: Seguramente encontremos en este santuario el tipo de incensarios y lámparas que Xiao nos pidió.
- Pervases: Por la montaña corren espíritus rebeldes, mientras los humanos duermen en sus laureles...
- Paimon: Perdón por interrumpir,
Nos gustaría pedir prestados un incensario y unas lámparas.
- Pervases: Vaya, esto sí que es algo que no se ve todos los días...
- Pervases: Una pareja entrando en un santuario, no para buscar ni adorar a los dioses o los Adeptus, sino para llevarse consigo los incensarios. Jajaja...
- Paimon: Sabemos que es de mala educación pedirlo, pero le prometemos que solo los necesitamos por un tiempo.
- Pervases: ¿Es para el ritual del Sonambulismo?
- Paimon: iGuau! ¿Cómo lo supo?
- Pervases: Llevo en este santuario mucho más tiempo del que se imaginan.
- Pervases: Quizás me ha sido otorgado cierto entendimiento de la magia adéptica como recompensa por mi devoción.
- Paimon: Guau, Paimon nunca ha oído algo así.
- Pervases: No importa. Tomen lo que necesiten. Me alegro que estos objetos les sean de utilidad.
- Pervases: ... De todos modos, no sirven de mucho aquí...
¿Hay algo que le preocupe?
- Pervases: Nada en lo que puedan ayudarme. Tomen lo que deseen.
Bueno... ¡Muchas gracias!
- Pervases: No es nada. Llévense lo que deseen.
- (Recoge el incensario para el ritual)
- Paimon: Este incensario servirá, ¿cierto?
- Paimon: Al menos no está tan deteriorado como este santuario...
- Paimon: Ahora solo necesitamos lámparas ceremoniales, ¿verdad? ¡Mientras más temprano acabemos con esto, mejor!
- (Recoge las lámparas ceremoniales para el ritual)
- Paimon: Paimon cree que hemos reunido todo lo necesario. Pero antes de irnos vayamos a ver a esa persona. ¿Qué dices?
- (Regresa a buscar a Pervases)
- Paimon: ¿Eh? ¿A dónde fue? Estaba aquí hace un instante...
- Estatua: Supuse que, una vez que tuvieran aquello por lo que vinieron, se olvidarían de mi y se irían...
- Paimon: ¡Ah! ¡Es la voz de ese señor! ¿Hola? ¿D-dónde está?
- Estatua: Mi forma dejó de existir hace mil años. Lo que presenciaron hace un momento fue una ilusión creada por la técnica adéptica conocida como "Permanencia de lo mortal".
- Estatua: Ahora que han tomado las lámparas ceremoniales y el incensario utilizados en el ritual de Persistencia de lo mortal, mi forma ha dejado de ser visible.
Entonces, es...
¿E-es usted un fantasma?
- Estatua: Jaja... Bueno, eso es cierto, de algún modo. Hay una línea muy fina entre ser un Adeptus o un fantasma.
- Estatua: En el pasado, fui un Adeptus menor entre los Yakshas, al que el mismo Rex Lapis le otorgó el nombre de "Pervases". Sin embargo, mis fuerzas flaquearon y caí en el campo de batalla.
- Estatua: Hoy es el aniversario de mi muerte. Mi último deseo era ver al Liyue de hoy en día, por lo que me tomé la libertad de hacer el ritual aquí.
- Estatua: Hablando de eso, vienen de parte del Gran Cazador de Demonios; ¿cierto?
- Paimon: Entonces, ¿se conocen?
- Estatua: Puedo detectar su aura... y el peso de su karma en ustedes.
- Estatua: *Suspira*, incluso después de tantos milenios, sigue llevando a cuestas la carga de ese gran dolor, ¿no es así?
- Estatua: Hace que me sienta avergonzado de mí mismo...
- Paimon: No diga eso, Pervases. Usted dio su vida por Liyue, ¿no?
- Estatua: La vida es algo valioso, sí... Pero comparado con lo que soporta el Gran Cazador de Demonios, siento que morir fue el camino fácil.
- Paimon: Pervases...
- Estatua: Jaja, discúlpenme. Los cumpleaños son ocasiones alegres, pero es difícil no sentir tristeza en el aniversario de mi muerte.
- Estatua: Me temo que el ritual de Permanencia de lo mortal no durará mucho más. Cuídense y saluden de mi parte al Gran Cazador de Demonios...
¡Lo haremos!
Cuídese usted también, Pervases...
- Estatua: *Suspira*, ojalá pudiera probar un auténtico pez ticker a la parrilla por última vez...
- Estatua: Entre las olas y las tormentas busco peces, entre el viento y la nieve purgo el mal...
- Estatua: ...
- Paimon: Oh, parece que se fue... ¿Sabes? Paimon espera que alguien recuerde al Yaksha Pervases.
- Paimon: Bueno, nosotros deberíamos irnos también. i Traigámosle alguna ofrenda cuando tengamos tiempo!
- (Habla con Xiao)
- Xiao: ¿Ya tienen todo lo necesario para el ritual?
- Xiao: Humm... Este incensario, estas lámparas... Su estilo es perfecto, casi como si estuvieran hechas específicamente para un ritual Adeptus. ¿En dónde los encontraron?
Son de un Yaksha llamado Pervases.
- Paimon: Por cierto, iPervases te manda saludos!
- Xiao: Pervases...
- Xiao: Ya veo... Sí, encajan mucho con su estilo.
- Xiao: Como pensé, parece que él tampoco podia dejar a Liyue atrás... Espero que la actual prosperidad de esta región le permita descansar en paz.
- Xiao: Bien, comencemos a preparar el ritual.
- Xiao: Coloca el incensario en el medio y rodéalo con las lámparas ceremoniales. Luego, adorna la zona con los objetos que sirven para enfriar. Una vez hecho esto, procederemos.
- Xiao: Sí, así está bien. Lo siguiente es la clave para el ritual de Sonambulismo.
- Xiao: Hay cuatro pasos necesarios: ofrecer el incienso, meditar, hacer un encantamiento y disparar una flecha.
- Paimon: ¿Tantas molestias para un ritual?...
- Xiao: Las artes adépticas son fruto de milenios de estudio. Su funcionamiento místico no se debe menospreciar.
- Xiao: Si no lo tomamos en serio, esta técnica podría devorar la carne propia o hacer que el espíritu se separe del cuerpo para siempre...
- Paimon: ¡Ay, no quería saber eso! ¡Paimon no hablará más!
- Xiao: Para ofrecer el incienso, simplemente quemamos una varilla en el incensario mientras ofrecemos nuestro máximo respeto a Rex Lapis.
- Xiao: Para meditar, nos vaciamos de pensamientos triviales y centramos nuestra atención en el ritual que estamos realizando.
- Xiao: Luego, recitamos el encantamiento en voz alta: "¡Oh, Devayaksha, trae el pecado contigo!"
- Xiao: Finalmente, dispararemos una flecha a cada una de las estatuas de Yakshas, con lo que obtendremos su para nuestro contrato.
- Xiao: Si todo va bien, el alma de ese hombre aparecerá ante nosotros.
Entendido.
*Gulp*
- Xiao: Si no tienen más preguntas, comencemos.
- Paimon: Bueno... primero ofrezcamos el incienso, ¿de acuerdo? Ya sabes, siempre con mucho hacia Rex Lapis.
- (Lleva a cabo la ceremonia en el orden adecuado)
- Paimon: Ahora meditemos... Eh... ¡Paimon no quiere en ese impostor!
Ommm...
- Paimon: Ommm...
Ommm...
- Paimon: Ommm...
Ommm, ommm...
- Paimon: Ommm, ommm...
¡Oh, Devayaksha, trae el pecado contigo!
- Paimon: Ehmm... ¡Trae el pecado!
- (Dispara al punto luminoso de las dos)
- Paimon: Con eso terminamos el ritual. Seguimos las instrucciones al pie de la letra!
- Xiao: Sí... más o menos...
- Xiao: Déjenme el resto a mí. Ustedes prepárense para darle la bienvenida.
- Al terminar la ceremonia, el alma de Ladrón de Estrellas aparece frente a ustedes...
- Ladrón de Estrellas: ¿Dónde estoy?... ¿Eh? Ustedes dos me resultan familiViajero.
- Ladrón de Estrellas: ¿Qué le pasa a mi cuerpo? Me siento... ligero como una pluma.
Invocamos tu espíritu con magia adéptica.
- Ladrón de Estrellas: ¿Magia adéptica? ¡Jajaja! ¿Te atreves a fingir ser un Adeptus en mi presencia?
- Ladrón de Estrellas: Por cierto, ¿qué lugar es este? Estaba descansando serenamente en la Posada Wangshu.
Si, porque estás muerto.
- Ladrón de Estrellas: ¡¿Mu-mu-muerto?!
- Ladrón de Estrellas: ¡Imposible! Estaba descansando serenamente en la Posada Wangshu...
- Ladrón de Estrellas: ¡Ah, ya entiendo! Sí, debe ser eso... Tal como se esperaría de un Adeptus como yo...
- Ladrón de Estrellas: ¡Debo estar soñando!
- Paimon: ¡Hum! Este tipo no tiene remedio, ¿eh?
No estás soñando.
Pero no puedes sentir dolor en tus sueños...
- Ladrón de Estrellas: ¿Eh? ¿Qué pretenden hacer? ¿De verdad creen que permitiré tal insolencia en mis propios sueños?
- Paimon: Vamos, Viajero, hazlo.
- (Castiga el alma del falso Adeptus)
- Ladrón de Estrellas: ¡Espera, por favor! M-me rindo... ¡Me rindo!
¿Ahora sí nos crees?
- Ladrón de Estrellas: ¡Si! ¡Les creo! Pensé que iba a morir...
¿Sigues haciéndote pasar por un Adeptus?
- Ladrón de Estrellas: No, de ninguna manera. Por poco muero...
- Ladrón de Estrellas: ¿Por qué tuve la desgracia de conocerlos a ustedes
- Ladrón de Estrellas: Por favor, grandes Adeptus, perdónenme la vida. No volveré a hacerlo nunca más...
- Paimon: Invocamos tu espíritu, pero no somos Adeptus. El verdadero Adeptus es él.
- Xiao: Engañaste a la gente con tu charlatanería, te hiciste pasar por un Adeptus, exorcizaste a los demonios sin matarlos y mostraste una total falta de respeto por la vida.
- Xiao: Un día, cosecharás lo que sembraste. ¡Para aquellos que atraen el mal, no hay redención!
- Ladrón de Estrellas: Ah... Yo... Usted es...
- Paimon: Parece que Xiao lo asustó tanto que no se atreve ni a hablar.
- Ladrón de Estrellas: Oh, gran Adeptus, ¿puedo preguntar cuál es su nombre?
Es el Gran Cazador de Demonios.
Es el Guardián Yaksha.
- Ladrón de Estrellas: ¡Es usted! ¡De verdad es usted! ¡Nunca imaginé que un día me -encontraría con el Gran Cazador de Demonios, el Guardián Yaksha, en persona!
- Paimon: ¿Conoces a Xiao?
- Ladrón de Estrellas: ¡Por supuesto! Mi abuelo era un estudioso del folclore. Crecí escuchando historias sobre el Gran Cazador de Demonios.
- Ladrón de Estrellas: Sigo coleccionando libros sobre los Yakshas hasta hoy en día.
- Ladrón de Estrellas: Pero desde que descubrí un Sello del Permiso mientras buscaba entre los objetos personales de mi abuelo...
- Ladrón de Estrellas: Al principio, solo imitaba a los Adeptus por diversión, pero con el tiempo comencé a alejarme más y más del camino del bien...
- Paimon: Así que esa es tu historia... Entonces, básicamente, eres admirador de Xiao, ¿no?
- Ladrón de Estrellas: Sí. Gracias a ambos por darme la oportunidad presenciar al Gran Cazador de Demonios en carne y hueso. ¡Es como un sueño hecho realidad!
- Paimon: En realidad, esa no era nuestra intención...
- Ladrón de Estrellas: Oh, Gran Cazador de Demonios, permítame hacer este juramento ante usted...
- Ladrón de Estrellas: ¡Juro alejarme del mal, vivir una vida honesta y no manchar el nombre de los Adeptus nunca más!
- Xiao: Recordaré tu juramento. Ahora, vete.
- Ladrón de Estrellas: Gracias... Mil gracias por su perdón, y por todo lo que ha hecho por Liyue.
- Paimon: Ese juramento que hizo pareció bastante sincero. Supongo que ya no seguirá engañando a la gente.
- Paimon: ¡Espera! Aún no hemos recuperado el Sello del Permiso. ¡Vayamos a la Posada Wangshu mañana a primera hora a buscarlo!
- (Dirigete a la Posada Wangshu y pregunta a Verr Goldet sobre el falso)
- Paimon: Hola, jefa. Una pregunta, ¿Ladrón de Estrellas se aloja aquí?
- Verr Goldet: ¿Ladrón de Estrellas...? Ah, ¿te refieres al Adeptus falso de la máscara?
- Verr Goldet: Hizo su reserva con el nombre de "Wang Ping'an".
Parece un nombre bastante común...
Entonces, después de todo es una persona común y corriente...
- Verr Goldet: Ya dejó su habitación. Dijo que iba a hacer una peregrinación en solitario...
- Verr Goldet: Ah, sí. También me pidió que le entregara esta carta a un viajero acompañado de un "hada parlante".
- Paimon: ¿Un "hada parlante"? ¿Quién será?
- Verr Goldet: Ah, tú debes ser el viajero del que hablaba. Toma, aquí está la carta.
- Paimon: Hasta nos dejó una carta... No será otro de sus trucos, ¿o si?
- Paimon: Vamos, ábrela! ¡Paimon tiene curiosidad!
- En la carta, el hombre corriente llamado Wang Ping'an les ofrece su sincero arrepentimiento. Está determinado a seguir la senda recta y a cumplir su promesa, renunciar al mal y hacer el bien para convertirse en un seguidor auténtico de los Adeptus.
- Ya devolvió todo el dinero que estafó haciéndose pasar por Adeptus, y adjunta en la carta el Sello del Permiso que heredó de su abuelo. Incluso les ha regalado todas sus pertenencias, ya que no son útiles para su reconversión...
- Paimon: ...
- Paimon: Parece que realmente nos dejó algunas cosas además de esta carta.
- Paimon: ¡Y en el sobre está el Sello del Permiso! ¡Hurra!
- Paimon: Paimon no ha conocido a un tipo tan malo como él en mucho tiempo...
Su carta me conmovió.
Todo fue posible gracias a Xiao.
- Paimon: Sí... En fin, vayamos a darle el Sello del Permiso a Xiao.
- (Habla con Xiao y devuélvele el Sello del Permiso)
- Paimon: iAsí que aquí estabas!
- Paimon: Recuperamos el Sello del Permiso. ¿Te lo quedas tú?
- Xiao: Tienen mi agradecimiento.
- Xiuhua: ¿Le gustaría comer algo, señor?
- Xiao: Un pez ticker a la parrilla, por favor.
- Xiuhua: Muy bien, ahora mismo se lo traigo.
- Paimon: ¿Eh? ¿No quieres tofu de almendras? Qué extraño...
- Xiao: Este era el plato favorito de Pervases...
- Xiao: Solo quería ver a qué sabe.
- Paimon: Oh...
- Xiao: "Entre las olas y las tormentas busco peces, entre el viento y la nieve purgo el mal...".
- Xiao: ...
- Xiao: ¿Necesitan algo más? Acostumbro a comer solo.
Entonces no te molestamos más...
Paimon, vamos...
- Paimon: Y así, la detective Paimon y su fiel compañero, el viajero, se escabullen silenciosamente...
Historial de cambios[]
Se añadió en la Versión 1.3