La profecía de Fontaine (nombre no oficial; denominada en el juego simplemente la profecía) es una profecía apocalíptica que se cree que fue predicha por Egeria, la ex Arconte Hydro. Sin embargo, se especula que la profecía pudo haber sido adivinada por Vedrfolnir, un Visionario.
Según la profecía, todos los habitantes de Fontaine nacen con un pecado que no puede ser absuelto. La profecía también establece que un día, los niveles del agua en Fontaine aumentarán y todos los individuos pecadores serán ahogados y disueltos, quedando solo con la Arconte Hydro, llorando en su trono. La profecía predice además que durante este gran diluvio, los pecados del pueblo de Fontaine serán lavados.
Historia[]
Durante el reinado de Egeria, muchos de sus seguidoras Oceánidas deseaban vivir vidas humanas. Debido a las restricciones biológicas de las Oceánidas, no podrían hacerlo a menos que se convirtieran en humanos.
Después de escuchar las súplicas por la vida humana, Egeria concedió su deseo utilizando los poderes otorgadores de vida del Mar Primigenio, que les dio a estas criaturas una sangre humana falsa, creandoles asi formas humanas en el proceso. Sin embargo, cualquier fontainiano que entrara en contacto con una concentración suficiente de agua de mar primordial no podría mantener su forma humana. Esto se debió a su constitución, lo que provocó que su sangre falsa escapara a la concentración de Agua de Mar Primigenia que los rodeaba, provocando en última instancia el fallo de su forma humana.
A pesar de las buenas intenciones de Egeria, la creación de una nueva especie de humanos fue una violación flagrante para la Orden Celestial y provocó su ira. Para castigar a Egeria por su transgresión, Celestia decretó que todas las ahora-humanas Oceánidas serían marcadas con el 'Pecado Original' para reflejar sus orígenes ilegítimos. Esto puso en marcha la profecía que predijo que algún día todos ellos se disolverían nuevamente en el Mar Primigenio durante una gran inundación.
Egeria ayudó a muchos de los criminales exiliados de Fontaine a construir un nuevo hogar, la Fuerte Merópide, que también utilizó para guardar su "secreto" en las profundidades del agua: una gran abertura hacia el Mar Primigenio. La fortaleza creció y finalmente se convirtió en un hogar para estos pecadores.
Después de la muerte de Egeria durante el Cataclismo, Foçalors, una de sus familiares Oceánidas, ascendería a Arconte. Foçalorscreó un recipiente humano que posteriormente separó de su divinidad, Furina. Furina actuó en lugar de Foçalors durante 500 años para engañar a Teyvat y a los Principios Celestiales haciéndoles creer que esta humana era la verdadero Arconte Hydro. Foçalors se escondio con su divinidad, junto con la Gnosis Hydro, dentro de la Analizadora de Instrucción Cardenalicia.
Foçalors aprovecharon las pruebas que continuamente ocurrían en la Ópera de la Epíclesis para convertir la fe de su pueblo durante estas pruebas en Indemnitium. Hizo esto para que el día que finalmente ocurriera el desastre, hubiera acumulado suficiente poder de Indemnitium para sentenciarse a muerte y destruir el Trono Divino del Arconte Hydro. Daría la bienvenida al recién reencarnado Soberano Hydro, Neuvillette, para que sirviera como Iudex de Fontaine. Cuando llegara el momento de su ejecución, ella podría devolverle su Gnosis, restaurando su autoridad total sobre el elemento Hydro. Neuvillette también tenía muchas preguntas sobre sus orígenes, ya que había sufrido una gran pérdida de memoria por no haber nacido dragón y, por lo tanto, Foçalors esperaba que al experimentar una variedad de emociones humanas en la corte, sería capaz de comprender a la humanidad y querer protegerla.
En tiempos recientes, Wriothesley llevó al Viajero a la Zona Prohibida en la Fortaleza de Meropide, mostrando una gran compuerta que cierra el Mar Primordial debajo de la fortaleza. Wriothesley confirmó que si la puerta fallaba, toda Fontaine se disolvería en el mar. Esto ha llevado a Wriothesley a construir su propio barco, El Vengerai, como precaución contra la profecía. El barco se inspiró en la leyenda de Remuria, donde el rey Remo tomó la Abeja Dorada y montó en la Fortuna sobre las aguas. Sin embargo, Remuria cayó en la profecía y se hundió en el Abismo. Esto ocurrió algún tiempo después de que Egeria fuera creada como un nuevo "corazón" del Mar Primigenio.
El día en que la profecía finalmente se haría realidad, Furina fue juzgada por los ciudadanos de Fontaine acusada de engañar a su gente al ocultar su verdadera identidad y presionarla para que confesara sus secretos. Tal como se profetizó, el pueblo de Fontaine la declaró culpable en el juicio más Importante en la historia de la nación. Poco después de que ella fuera declarada culpable, una criatura peligrosa del Abismo cargó contra la Ópera e intentó tragarse enteros a muchos fontainianos, antes de ser desviada por Nobile en su forma Legado del mal, y más tarde ser derrotada por Neuvillette y el Viajero.
Foçalors, como estaba planeado, se sentenciarían a muerte y abolirían la posición de Arconte Hydro, otorgando a Neuvillette plena autoridad sobre el elemento Hydro y liberando a Furina de su maldición en el proceso. Neuvillette, con su nueva autoridad sobre Hydro y la Soberanía, utilizó los poderes del Agua Primordial para convertir su sangre humana falsa en sangre humana real, perdonando a la gente de Fontaine de su "pecado original", que los convirtió en "verdaderos" humanos. Durante su batalla contra el Narval Devoraestrellas, Neuvillette separó el Agua Primigenia consumida por la bestia, permitiéndole a él y al Viajero someterla. La batalla resultó en que sus turbulentas energías Hydro "abrumaron" los profundos mares de Teyvat, inundando Fontaine como lo predijo la profecía; sin embargo, como la gente de Fontaine ahora era verdaderamente humana y ya no tenía agua de mar Primigenio en sus cuerpos, no se disolvieron en agua y las aguas retrocedieron tan rápido como inundaron la nación. Sin embargo, los que ya estaban disueltos no fueron restituidos.
Placas proféticas[]
