Mensajes llegados de lejos es la primera y única misión de evento del Acto I del evento «Cantar de copas».
Detalles[]
- Ve al Gremio de Aventureros
- Dirígete a la Sede de los Caballeros de Favonius
- Ve a la oficina de la Gran Maestra
- Sal de la Sede de los Caballeros de Favonius
- Dirígete al Reino de los Lobos
- Usa la Visión Elemental para seguir el rastro elemental Electro
- Regresa a la oficina de la Gran Maestra
- Espera dos días hasta que empiece el Festival de la Vendimia (08-10 h)
- Dirígete al Festival de la Vendimia
- Habla con Venti
Recompensas[]
- Protogema
- Fiebre festiva
- Mora
- Ingenio del héroe
Diálogos[]
- (Habla con Katheryne)
- Katheryne: Déjame confirmarlo... Sí, todas las tareas de la lista están completas. (Viajero), Paimon, les estamos muy agradecidos por su ayuda.
- Katheryne: Menos mal que pudieron venir en cuanto recibieron el mensaje, de lo contrario, no habríamos sabido qué hacer con todos estos encargos.
- Paimon: ¡Jeje, no es nada! Los últimos dos días han sido bastante ajetreados, pero todo lo que hemos tenido que hacer han sido tareas sencillas como transportar cosas y hacer de escoltas.
- Paimon: Cuando dijiste que andabas escasa de personal, creímos que nos esperaba otra aventura larga y ardua.
- Katheryne: Ustedes dos son aventureros experimentados y es cierto que están capacitados para hacer encargos de mucho mayor calibre que sus tareas recientes. Sin embargo, Mondstadt se enfrenta a este problema todos los años por estas fechas.
- Paimon: ¿Eh? ¿Por qué?
¿Quizá sea porque es temporada de cosecha?
- Katheryne: (Viajero), estás en lo cierto. Es una época ideal para cosechar trigo y fruta. Y para Mondstadt, la capital del vino en Teyvat, es también la temporada vinícola más importante del año.
- Katheryne: Los agricultores se apresuran a vender sus productos frescos y los grandes comerciantes de vino buscan comprar los mejores ingredientes para sus nuevos productos.
- Paimon: Ahh. Bueno, no es de extrañar que en los últimos días se hable tanto de vino.
- Fynn: ¿Eh? ¿Qué quieres decir? ¿En serio?
- Bernhard: Sí, lo juro, no me lo estoy inventado. ¡La Gran Maestra Intendente llamó a todos a reunirse en el salón principal de la sede! Rápido, si no vamos ya, ¡llegaremos tarde!
- Fynn: ¡Oye! ¡Espérame!
- Paimon: ¿Por qué parecían esos dos Caballeros de Favonius tan... alterados?
- Kaeya: Vaya, pero si son (Viajero) y Paimon. ¡Hola! Qué extraordinario placer.
- Paimon: ¡Kaeya, justo la persona que necesitábamos! ¿Por qué de repente van todos corriendo hacia la Sede de los Caballeros?
¿Necesitan nuestra ayuda?
- Kaeya: Jaja, no te preocupes, esta no es una de esas ocasiones en las que tienes que venir a salvarlos a todos.
- Kaeya: Lo único que ha ocurrido es que los Caballeros de Favonius acaban de recibir una carta del Gran Maestro. La Gran Maestra Intendente, Jean, convocará en breve una reunión en el salón principal para analizarla.
- Paimon: Uf, es un alivio... Espera un segundo. ¿Qué acabas de decir?
¡¿Los Caballeros de Favonius acaban de recibir una carta del Gran Maestro?!
¡¿Hay nuevas del Gran Maestro?!
- Paimon: ¿El Gran Maestro de los Caballeros de Favonius? ¿Ese no es... Varka, el líder de la expedición legendaria?
- Paimon: Entonces, ¿qué dice Varka en la carta? ¿Cómo va la expedición? ¿Cuándo van a volver?
- Kaeya: Oh, ¿cómo es que de repente estás tan interesada en el Gran Maestro? No sabía que fueras tan curiosa.
- Paimon: Es normal, ¿no? Paimon apuesta a que tú también sentirías curiosidad si hubieras oído hablar mucho de alguien pero nunca lo hubieras conocido. Incluso la Maestra Jean dice que es una leyenda viviente... Es muy difícil no emocionarse después de escuchar eso.
- Paimon: Además, llevan de expedición ya una laaaarga temporada, y todavía no hemos sabido nada de lo que se traen entre manos.
- Kaeya: Jajaja, la Gran Maestra Intendente es muy generosa con sus elogios.
- Kaeya: Varka trajo bastantes problemas a quienes lo acompañaban en su camino para convertirse en leyenda. Tendré que hablarles de ello en algún momento.
- Kaeya: De todos modos, ya que esto ha despertado su interés, ¿por qué no se reúnen conmigo en la sede y vemos qué dice la carta?
- Kaeya: Después de todo, echamos de menos a nuestro Caballero Honorario. Ha pasado mucho tiempo desde tu última visita.
- Paimon: Claro, vayamos a ver de qué se trata. Adiós, Katheryne, hasta pronto.
- Katheryne: Está bien, vayan con cuidado.
- (Entra a los cuarteles generales de los Caballero de Favonius)
- Kaeya: Humm, parece que casi todo el mundo está aquí.
- Lisa: Hola, cariño, Paimon, no sabía que fueran a venir. ¿Así que se han enterado de lo de la carta?
- Paimon: Sí, nos encontramos con Kaeya cerca del Gremio de Aventureros.
- Paimon: Guau... Paimon nunca había visto tanta gente a la vez en la sala principal.
- Paimon: Paimon se está poniendo un poco nerviosa...
- Kaeya: Jaja, no te dejes llevar demasiado, ¿de acuerdo? Si conozco al Gran Maestro, el hecho de que tenga tiempo para escribir cartas significa que probablemente no sea nada serio. Seguro que no son malas noticias.
- Lisa: Kaeya exagera un poco, pero por lo demás estoy de acuerdo.
- Lisa: Después de todo, Mika no es el tipo de persona capaz de mantener el secreto si hubiera algún problema. Llevaría la verdad escrita en su cara.
¿Mika? ¿Quién es Mika?
- Lisa: Allí, mira. El chico que está junto a Jean frente a la escalera.
- Lisa: Era topógrafo en el equipo de Eula. Tiene mucho talento en lo que hace y es una persona muy fiable. Cuando el equipo de expedición se puso en marcha, el Gran Maestro lo designó como miembro principal del equipo de primera línea.
- Lisa: Él es quien trajo la carta.
- Jean: Por favor, todo el mundo preste atención. Ahora que estamos todos aquí, vamos a proceder a leer la carta del Gran Maestro.
- Jean: Mika, por favor, adelante.
- Mika: ¡P-por supuesto, Maestra Jean!
- Mika: Bien... *Ejem*. Hola a todos, soy Mika, topógrafo del Equipo de Reconocimiento. Ehmm... Recientemente, he estado participando en una misión con el equipo de expedición. Ahora voy a leer la carta del Gran Maestro Varka en voz alta para todos ustedes.
- Mika: *Ejem*. “A los Caballeros de Favonius: saludos a todos. Soy Varka”.
- Mika: “Lo primero que quiero decirles es que, por favor, estén tranquilos. El equipo de expedición está a salvo y no falta ninguno de sus miembros”.
- Bernhard: ¡Qué buena noticia!
- Fynn: Uf, me sudan las manos...
- Jean: ...
- Mika: Humm... ¿Puedo continuar?
- Jean: Continúa, Mika.
- Mika: “Muy bien, ahora que sus temores se han disipado, confío en que estén preparados para escuchar el resto de la carta. Les escribo desde el extremo norte de Teyvat a la luz de una estufa. Los del equipo de expedición están resguardados aquí mientras nos reabastecemos”.
- Mika: “Una vez les dije que el propósito de esta expedición estaba relacionado con un peligroso secreto de días pasados. Todavía no puedo revelar más que esto, pero basta con decir que no deben preocuparse por el progreso de nuestra misión”.
- Mika: “En los últimos dos meses hemos tenido un visitante inesperado: el miembro de Los Once de los Fatui conocido como ‘El Capitán’”.
- Paimon: ¿Eh? ¿El Capitán?
...
- Mika: “Soy plenamente consciente de las recientes atrocidades de los Fatui en Mondstadt. Sin embargo, en esta ocasión, El Capitán no fue hostil con nosotros”.
- Mika: “Abre paréntesis: Supongo que es porque esta vez estamos en el mismo barco que Snezhnaya. Cierra paréntesis”.
- Mika: “Este tipo lo oculta todo bajo la máscara que lleva, por lo que nadie puede conocer su pasado ni sus orígenes. Sin embargo, una cosa es segura: es tan duro como el hierro por tener el valor de desafiar a los dioses siendo un simple mortal”.
- Mika: “No dudo de que incluso pudiera acabar con un Guardián de las Ruinas apuñalándolo en su gran ojo brillante con uno de los lápices de colores de Klee. Abre paréntesis: Ni se les ocurra intentarlo. Cierra paréntesis”.
- Mika: “Nuestros exploradores descubrieron que El Capitán recibió órdenes de ir a Natlan hace tres días. Podremos dormir mucho mejor ahora que no tenemos que preocuparnos por él”.
- Mika: “Admito que hizo algunas cosas que nos fueron de ayuda, pero aun así, sigue en deuda con nosotros”.
- Mika: “El Festival de la Vendimia de Mondstadt debe estar a punto de celebrarse. Es una verdadera lástima no poder pasarlo con ustedes este año otra vez”.
- Mika: “Todos echamos de menos el buen vino de Mondstadt y el tiempo que pasamos con cada uno de ustedes”.
- Mika: “Espero que ustedes y todos los ciudadanos de Mondstadt disfruten todo lo posible del festival. Tomen varias copas por nosotros. El vino de edición limitada del festival del Viñedo del Amanecer servirá”.
- Mika: “Que Barbatos bendiga Mondstadt y que el viento haga regresar nuestros sentimientos hasta ustedes. Varka”.
- Mika: “P.D.: si se preguntan quién es más poderoso, El Capitán o yo, bueno, ¡yo soy el Gran Maestro! Hay diez capitanes en los Caballeros de Favonius, pero solo un Gran Maestro, jajajaja”. Su risa, no la mía.
- Mika: La carta termina aquí. Gracias a todos por su atención.
- Jean: Gracias, Mika.
- Mika: Maestra Jean, eh... Me acabo de dar cuenta de que hay algo más escrito en el reverso de la última página...
- Mika: “P.P.D.: me quedé sin papel, así que lo escribiré aquí. Lisa, este mensaje es para ti”. Oh, parece que esta parte es del Gran Maestro para la Srta. Lisa.
- Lisa: ¿Oh, para mí?
- Jean: Ah, como es un mensaje especial... Lisa, hablemos de ello en privado.
- Jean: Señoras y señores, ¡escúchenme! Como ha dicho el Gran Maestro, el Festival de la Vendimia tendrá lugar dentro de unos días, y cuán afortunados somos en este momento de haber recibido noticias de que todo va bien con la expedición.
- Jean: Aunque no puedan volver a Mondstadt para celebrarlo con nosotros, el Festival de la Vendimia sigue siendo un gran acontecimiento muy esperado por toda Mondstadt.
- Jean: Espero que todos vigilen sus puestos y cumplan con sus deberes, tanto por nuestros colegas lejanos que participan en la expedición como por la gente trabajadora de Mondstadt.
- Jean: Y, por supuesto, durante su tiempo libre, espero que puedan descansar, relajarse y disfrutar de este esperado festival.
- Jean: Con esto terminamos nuestra reunión. Pueden retirarse.
- Paimon: ¿Paimon escuchó bien? ¿Se encontraron con El Capitán de los Fatui? Humm... quién sabe de qué trataba el asunto, pero debió ser algo importante...
- Paimon: Pero bueno, olvidémonos de los Fatui. Lo importante ahora es el Festival de la Vendimia. Suena a que es una fiesta en la que se puede comer y beber gratis... ¡Paimon quiere saber más!
Típico de Paimon...
Clásico de Paimon.
- Lisa: Hola, cariños, ¿quieren venir a hablar con Jean? Había tanta gente que ni siquiera tuve la oportunidad de saludar.
- Paimon: ¡Suena bien! De acuerdo, vamos.
- (Entra a la oficina de la Gran Maestra)
- Jean: Ah, Lisa. La carta del Gran Maestro está sobre la mesa.
- Jean: (Viajero), Paimon, hace mucho tiempo que no nos vemos. No he tenido la oportunidad de hablar con ustedes hace un momento, discúlpenme.
- Jean: Si no tienen planes en los próximos días, ¿por qué no se quedan en Mondstadt por un tiempo? Pronto celebraremos el Festival de la Vendimia.
- Lisa: No se dejen engañar. Jean puede parecer muy serena, pero los ha extrañado mucho últimamente.
- Jean: *Suspira*, Lisa...
- Lisa: Jeje... Les dejo que se pongan al día. Yo iré a leer la carta.
Yo también he extrañado Mondstadt.
Yo también los he extrañado a todos.
- Paimon: ¡Si! Después de todo, Mondstadt es el punto de partida de nuestro viaje. Tenemos muchos buenos recuerdos aquí.
- Paimon: Por cierto, Maestra Jean, con respecto al Festival de la Vendimia, (Viajero) y Paimon no lo conocen muy bien. ¿Podrías hablarnos de ello?
- Jean: Sí, por supuesto.
- Jean: El Festival de la Vendimia, al igual que el Ludi Harpastum y el Festival de las Flores de Viento, es una festividad muy antigua en Mondstadt. Además, es la fiesta más importante del otoño.
- Jean: Cada otoño, el viento del oeste sopla en Mondstadt. Cuenta la leyenda que el maravilloso aroma de la producción de vino de Mondstadt durante la época de cosecha atrae incluso al Arconte Anemo, que es un gran amante del vino.
- Jean: Esté donde esté, se transformará en una suave brisa y volverá a su tierra.
- Paimon: Eh... Sí, eso suena al Arconte Anemo, claro...
- Jean: Por esta razón, la gente de Mondstadt llama al viento del oeste el “viento del retorno”. El Festival de la Vendimia comenzó originalmente como una celebración para dar la bienvenida al regreso de Barbatos.
- Jean: En el pasado, todos los hogares elaboraban nuevos vinos por esta época del año, y los mantenían sin abrir al menos hasta el Día del Viento del Retorno durante el Festival de la Vendimia del año siguiente.
- Jean: Los habitantes abren el vino viejo como símbolo de invitar al Arconte Anemo a beber con ellos. La leyenda dice que si el Arconte Anemo está satisfecho con el vino, invoca una suave brisa para otorgar a la gente una valiosa bendición.
¿Una “valiosa bendición”? ¿Cómo?
- Paimon: Conociéndole, probablemente los esté bendiciendo con más vino de calidad al año siguiente.
- Jean: Buena pregunta... pero realmente, no hay forma de saberlo.
- Jean: Estas historias son muy antiguas. Muchos de los detalles se han perdido en el tiempo.
- Paimon: Sí, seguro. Algunas historias cambian completamente a medida que se transmiten... De ahí que hoy en día la gente de Mondstadt se enzarce en interminables discusiones sobre qué tipo de flor es una flor de viento...
- Lisa: Todo forma parte de cómo se crea el patrimonio cultural.
- Jean: Así es. Pero, al menos por el momento, la tradición de rendir homenaje al Arconte Anemo en el Día del Viento del Retorno sigue viva, y el Festival de la Vendimia sigue siendo un momento para que los ciudadanos de Mondstadt compartan la alegría de la cosecha entre ellos mientras degustan buenos vinos.
- Jean: Esta es una época del año en la que mucha gente de Mondstadt que vive fuera regresa a su ciudad natal. Para los que no pueden volver, el Festival de la Vendimia es el periodo en el que echan más de menos a su familia y amigos.
- Paimon: Por eso el Gran Maestro escribió: “Que el viento haga regresar nuestros sentimientos hasta ustedes”.
- Jean: Este año, hemos unido fuerzas con la Iglesia de Favonius y el Gremio de Aventureros para organizar una celebración a orillas del Lago de Sidra, a las afueras de la Aldea Aguaclara. También habrá un tradicional mercado de licores durante el festival.
- Paimon: ¿“Mercado de licores”?
- Jean: Bueno, originalmente era simplemente un lugar al que acudían vinicultores y agricultores para intercambiar materias primas para la elaboración del vino.
- Jean: Hoy en día, es un asunto mucho más grande. No solo encontrarás una gran variedad de vinos, sino también bebidas de frutas de temporada y productos alimenticios para todos los gustos. También hay mucha gente que vende artículos de segunda mano y artesanales en el mercado.
- Jean: Los Caballeros de Favonius tienen previsto aprovechar la ocasión para recaudar fondos para los niños y ancianos necesitados de la ciudad.
- Paimon: Vaya, suena muy bien.
- Jean: Si tienen tiempo, les animo a que echen un vistazo. Espero que la experiencia valga la pena. Por cierto, Lisa, ¿de qué trataba el mensaje que te envió el Gran Maestro?
- Lisa: Justo estaba pensando en sacar el tema. El Gran Maestro dice que quiere que me encargue de algo para él, algo relacionado con el pasado de Razor.
¿El pasado de Razor?
- Paimon: Razor nos contó que lo crio una manada de lobos en el Reino de los Lobos.
- Paimon: Nunca conoció a sus padres. Según sus propias palabras, la manada de lobos es su “lupical”, que significa familia.
- Lisa: Sí, así lo entendí yo también.
- Lisa: Pero en su carta, el Gran Maestro decía que en el mueble que está encima de la tercera estantería, a la derecha del reloj de pie, en el despacho de Jean, hay una caja de madera que contiene algunos objetos que los padres de Razor dejaron para él. Dice que... “es el momento de darle la caja a Razor”.
- Paimon: ¿Eso significa que el Gran Maestro conocía a los padres de Razor?
- Lisa: Eso parece. El Gran Maestro no se encontró simplemente con Razor un día en el Reino de los Lobos y le enseñó a usar una espada. No, la conexión entre ellos se remonta a mucho antes.
- Paimon: ¡Guau! ¡Bueno, vamos a buscar a Razor! ¡Estará muy emocionado de saber algo sobre sus verdaderos padres!
- Lisa: Humm...
Paimon, espera.
Lisa, algo te preocupa
- Lisa: Ay, cariño. No se te escapa nada, ¿verdad?
- Lisa: Para un niño que nunca conoció a sus padres biológicos, este tipo de conversación siempre resulta difícil. Incluso para los que mejor se han adaptado.
- Lisa: En cambio, Razor creció en el Reino de los Lobos y ha tenido un contacto muy limitado con la sociedad humana... Quién sabe si está preparado o no para esto.
- Jean: Estoy segura de que el Gran Maestro habrá tenido en cuenta las circunstancias de Razor. Tal vez pensó que ahora sería el momento más apropiado.
- Lisa: Humm, tienes razón. Muy bien, cariños, ¿puedo encargarles que le den la noticia a Razor?
- Lisa: Razor siempre me ha considerado su maestra, así que puede que no se abra a mí si algo le molesta. Pero ustedes son sus amigos de confianza. Creo que tiene más sentido que se entere de esto por ustedes.
No te preocupes, déjalo en nuestras manos.
Lo hablaremos con Razor.
- Lisa: Te lo agradezco.
- Lisa: Intenta ser tan alentadoro como puedas. Alguien de su edad necesita todo el amor y apoyo posibles.
- (Acércate a la trampa en el Reino de los Lobos)
- Paimon: Oye, mira, aquí hay una trampa para cazar. Se parece a las que usan los cazadores de la Aldea Aguaclara...
...
- Paimon: ¿Eh? ¿Qué pasa?
Hay rastros elementales Electro cerca de la trampa.
- Paimon: ¿Rastros Electro? Humm... Paimon se pregunta si podrían ser de Razor. Pero Paimon recuerda que antes se le daba bastante bien evitar a los cazadores...
- Paimon: Bueno, de todos modos, sigamos esos rastros Electro y veamos a dónde nos llevan.
- (Llega al caminal del rastro Electro)
- Draff: ¡Muy bien! Ya hemos colocado la última trampa. Razor, gracias por venir conmigo hasta aquí.
- Razor: No pasar nada. Mis piernas ser fuertes... ¿Eh?
- Draff: Razor, ¿qué pasa?
- Razor: *Snif*. Olor... familiar. Amigos que venir de lejos.
- Paimon: ¡Razor!
- Paimon: ¡Oh, y Draff también está aquí! ¿Están cazando juntos?
- Draff: Sí, es casi época de cosecha y los jabalíes se aventuran en los pueblos y bodegas en busca de comida.
- Draff: Están pisoteando los cultivos y destruyendo los viñedos. Alguien podría resultar gravemente herido.
- Draff: Los Caballeros de Favonius acudieron a nosotros pidiendo ayuda para mantener a los jabalíes a una distancia segura de la población.
- Razor: Tío Gato Pardo y yo... atrapar jabalíes, proteger a todos.
- Paimon: ¡Guau, Razor, este es un gran paso para ti! Paimon recuerda que solías esconderte de los cazadores.
- Draff: Jeje, ¡para nada! Razor fue la estrella del espectáculo esta vez. Avisó a los lobos de que íbamos a venir, así que pudimos atravesar el Reino de los Lobos sin que nadie resultara herido.
- Razor: Estoy feliz de ayudar a todos, y a lupical. Pero... hablar mucho. Muy cansado ahora.
Sigue siendo un signo de progreso.
Me alegro por ti.
- Paimon: ¡Sí! Pero, humm... En realidad, vinimos aquí hoy porque tenemos una noticia muy importante...
- Le cuentan a Razor sobre la carta de Varka...
- Razor: Oh...
- Razor: Yo... no saber.
- Paimon: Razor... ¿no quieres saber sobre tus verdaderos padres?
- Razor: Quiero saber, pero... no quiero saber.
- Paimon: Eh... ¿Quieres saber y a la vez no quieres saber? Qué complicado...
- Draff: Viajero, ven a echar un vistazo a la trampa que acabo de colocar. Démosle a Razor algo de espacio para que pueda asimilar las cosas.
¿Qué pasa?
¿Hay algo que quieras decirme?
- Draff: Sí, tras ver cómo reaccionó Razor, tengo algunas conjeturas.
- Draff: Últimamente hemos cazado mucho juntos. Puede que el chico no hable mucho, pero aun así, siento que he llegado a entenderle un poco durante el tiempo que hemos pasado juntos.
- Draff: Esto es lo que creo... Definitivamente quiere saber más sobre sus padres, pero el miedo a lo desconocido está eclipsando al resto de sus sentimientos.
- Draff: Soy padre y tengo algo de experiencia con niños.
- Draff: Cuando Diona era pequeña, si llegaba tarde a casa por estar de caza, no me quitaba el ojo de encima en varios días, como si estuviera preocupada por si la abandonaba.
- Paimon: ¿Quieres decir que a Razor le preocupa que sus padres biológicos lo abandonaran?
- Draff: Exacto. Creo que ese es el quid de la cuestión. Y si resulta que fue así, no creo que podamos hacer nada para consolarlo. Sin embargo, esa no es mi única preocupación...
- Draff: Razor está creciendo a su propio ritmo y hay muchos problemas que aún no pueden resolverse completamente, pero está progresando poco a poco.
- Draff: Pero ahora este asunto de sus padres se añade a la ecuación... Podría empujarle a querer averiguar de una vez por todas de dónde viene y a dónde va.
- Paimon: Tienes una opinión similar a la de Lisa... A lo mejor es así como piensan los adultos.
- Paimon: Pero espera... Jean tenía una opinión diferente. Dijo que se trata más bien de confiar en otras personas y en tus propios instintos.
- Paimon: Humm... (Viajero), ¿qué opinas?
Tendrá que enfrentarse a ello tarde o temprano...
Como su amigo, estaré ahí para él.
- Draff: Lo entiendo. Bueno, me alivia que tenga un amigo como tú en quien confiar.
Paimon, ¿y si...?
- Le cuentas a Paimon tu plan sobre cómo abordar la situación...
- Paimon: ¡De acuerdo! Paimon lo ha entendido. Volvamos. No le hagamos esperar.
- Paimon: Oye, Razor... Entonces, ¿qué opinas al respecto?
- Razor: Yo seguir pensando... Mi corazón sentirse raro... como si en él clavar gancho de lobo.
¿Qué opinas de Varka?
- Razor: ¿Varka? Humm... Él grande y fuerte, gustarle reír.
Entonces, ¿confías en Varka?
- Razor: Sí, confiar.
- Razor: ... Él ser amable conmigo, dar nombre, enseñarme a luchar. Pero ahora... ocupado con trabajo importante... Yo echar de menos.
- Paimon: Sabes, Razor, Varka usó todo el papel para escribir esta carta, pero aun así se aseguró de encontrar espacio en el reverso para añadir una nota para Lisa. Le dijo específicamente que te diera las cosas que tus padres dejaron para ti...
- Paimon: Eso significa que piensa que esas cosas son muy importantes para ti.
- Paimon: Y lo que es más importante... pase lo que pase, (Viajero), Lisa, Paimon y todos los amigos que conoces estaremos ahí para ti.
No te preocupes, todo irá bien.
- Draff: ¡Eso es! El Tío Gato Pardo también está aquí para apoyarte.
- Razor: Sí. Gracias. Ya decidir. Yo querer... ver a mi maestra con ustedes.
- Draff: ¡Jaja, esa es la actitud, chico!
- Draff: Bueno, será mejor que vayan partiendo. Yo estoy a punto de terminar aquí, así que me iré a casa enseguida. Debo pasar más tiempo con mi hija antes de que empiece el Festival de la Vendimia, jajaja...
- Paimon: Hasta la próxima, Draff.
- (Vuelve a la oficina de la Gran Maestra)
- Paimon: Lisa, hemos traído a Razor.
- Razor: Hola, maestra. Yo venir aquí para ver caja.
- Lisa: Ah, mi pequeño lobo está de buen humor. Supongo que ya te habrán contado toda la historia.
- Lisa: Aquí la tienes, la caja de madera. No la he tocado, excepto para sacarla del armario. Cuando estés seguro de que estás listo, puedes abrirla tú mismo.
- Razor: Sí, estar seguro.
- Razor: *Clic*
- Paimon: Oh... Esto es solo un montón de trastos. Paimon pensó que al menos habría una carta, o algo así.
- Paimon: ¿Es posible que... después de todo este tiempo, Varka se haya confundido con otra caja?
- Razor: *Snif*. Haber un olor...
- Paimon: ¿Un olor? ¿Qué olor?
- Razor: Un aroma que recuerdo de hace mucho, mucho tiempo. Es... el olor de ellos.
- Razor: El olor humano... el olor de padre y madre.
...
- Lisa: Increíble... Todavía recuerdas los olores de tu infancia.
- Paimon: Guau, realmente tienes un buen sentido del olfato, Razor. Supongo que ser salvaje por naturaleza tiene sus ventajas... ¡Veamos qué otras pistas podemos encontrar!
- Paimon: Humm, este títere de lana parece un poco estropeado. Supongo que debe estar hecho a mano. Eh... ¿Esto es una parte de un Guardián de las Ruinas?
- Paimon: Espera... ¡Oigan, miren, esta botella de vino todavía está medio llena!
- Paimon: También hay una nota en ella: “Vino”, ehmm... “Vino milvientos”.
- Lisa: Oh, ¿la botella es de un vino milvientos?
- Razor: Maestra, ¿tú conocerlo?
- Lisa: Por supuesto. El vino milvientos fue el primer vino que la gente de Mondstadt aprendió a hacer, o eso dicen.
- Lisa: En cuanto al origen de su nombre, algunos dicen que es una referencia a los numerosos ingredientes utilizados para su elaboración, mientras que otros dicen que es porque cada botella tiene un sabor ligeramente diferente.
- Lisa: Recuerdo haber leído en algún sitio que hay todo tipo de formas extrañas y maravillosas de prepararlo, y que es muy difícil asegurar que salga siempre con el mismo sabor.
- Lisa: Todo esto hace que no sea práctico comercializarlo. Los comerciantes de vino se sienten mucho más cómodos trabajando con productos fiables y con consistencia en su sabor.
- Lisa: Por eso casi nunca verás vino milvientos en los mercados o tabernas.
- Lisa: De hecho, parece que tus padres prepararon esta botella ellos mismos.
- Paimon: Eso debe significar que se trata de algo muy importante... ¡Ooh, Paimon tiene una idea! Razor, tienes un gran olfato. ¿Por qué no la abres y hueles un poco? Tal vez te diga algo.
- Razor: Bien.
- Razor: ...
- Paimon: Oh, parece muy concentrado... ¿y está sonriendo?
- Lisa: ¿Encontraste algo?
- Razor: Dulce, frío, un poco amargo... A mí gustar. Muchas cosas, todas mezcladas.
- Razor: Pero cosas en el vino oler diferente...
- Paimon: ¿Ni siquiera tú sabrías decir de qué se trata, Razor?
- Razor: Yo intentar de nuevo.
- Razor: ...
- Razor: Oh...
- Lisa: Está bien, Razor, no te presiones demasiado. ¿Qué hacemos cuando intentamos algo y no funciona?
- Razor: Cambiar... el método.
- Lisa: Así es. Todavía recuerdas lo que te enseñé.
- Lisa: Queda poco para que empiece el Festival de la Vendimia. Quienes saben mucho sobre vinos se reunirán en Mondstadt. Seguramente habrá alguien que sepa algo sobre el vino milvientos.
- Paimon: ¡Oh, buena idea!
(¿Vendrá Venti...?)
- Lisa: Asegúrense de no perderse la ceremonia de apertura, cariños. Todo el mundo estará allí. Razor, tú también deberías ir, será una buena oportunidad para preguntar por ahí.
- Razor: De acuerdo. Preguntar a mucha gente... Yo intentar.
- Paimon: No te preocupes, estaremos a tu lado. Podemos ser tus intermediarios. ¡Ya sabes, como lo fuiste con los lobos por Draff!
Interesante analogía...
Estaremos contigo, tal y como lo prometimos.
- Razor: De acuerdo. Entonces, regresar. Yo tener que contar a lupical sobre madre y padre humanos.
- Paimon: ¡Bien! ¡Nos vemos en la inauguración!
- (Habla con Venti)
- Paimon: ¡Bardo de pacotilla!
Cuánto tiempo sin vernos.
Me alegro de verte de nuevo.
- Venti: (Viajero), Paimon, ¿cómo están? Jaja, tenía el presentimiento de que me encontraría con ustedes pronto, durante este festival tan encantador.
- Paimon: Hablas como un verdadero poeta... Humm, pero leyendo entre líneas, si una botella es alegría y dos son felicidad, ¿cuántas botellas hacen falta para ser “encantador”, exactamente?
- Venti: Jajaja, no digas eso. Este festival tiene mucho más que ofrecer además de alcohol.
- Venti: Por cierto, ¡hola, Razor! ¿Qué tal?
- Razor: Bien. Yo tener que... preguntar algo.
- Paimon: Sí, Razor tiene algo que preguntarte. ¿Sabes algo del vino milvientos?
- Venti: Oh... ese nombre me trae recuerdos. Déjame pensar... ¿cuánto tiempo ha pasado desde la última vez que oí a alguien mencionar el vino milvientos?
- Paimon: Los padres de Razor le dejaron una caja con media botella de vino dentro, y hay una etiqueta que dice “Vino milvientos”.
- Paimon: Hemos oído que hay mucha historia detrás de este tipo de vino, y que los métodos de elaboración se remontan a mucho tiempo atrás, así que pensamos que serías la persona adecuada a la que preguntar.
- Razor: Olor bueno, pero... contenido desconocido.
- Venti: Ya veo, ya veo, ¿así que quieres saber cómo se hace el vino milvientos? Bueno, has venido a la persona adecuada. Resulta que conozco un pequeño poema llamado... bueno, casualmente “Vino milvientos”.
- Venti: Iba a guardarla para el Día del Viento del Retorno, pero no seré yo quien niegue una serenata anticipada a un amigo necesitado. ¿Qué te parece? ¿Te la recito?
- Razor: Un poema... No ser fácil de entender, pero yo querer escuchar.
- Venti: Excelente respuesta. Entonces, *ejem*, allá voy:
- Venti: “Llena los barriles y guárdalos en reposo, luego espera, espera un día más ventoso.Encera las botellas, séllalas cuidadosamente,nPara el viento del sur que alivia, para el viento del norte que muerde”.
- Venti: “¿A qué sabe este buen vino en realidad? Al nombre de Mondstadt, al dulce sueño de la libertad.¿Y qué es lo que lo hace fermentar? La valentía para explorar, la ternura para amar”.
- Venti: “La perseverancia del guardián, firme como antaño. Uniéndose a los mil vientos en una canción de ánimo, el vino agrio se vuelve dulce, se humedece el barril rugoso, luego espera, espera un día más ventoso”.
- Venti: Jeje, gracias por los aplausos. ¿Les ha servido de algo el poema?
- Razor: Ser como vino. Un poco dulce, pero ahora, cabeza dar vueltas. No comprender.
- Paimon: No te preocupes, ¡no eres el único! Se suponía que trataba sobre la elaboración del vino, ¡pero no nos ha dado ni un solo detalle sobre el proceso!
- Venti: Jaja, bueno, tal vez sea un poco abstracto y romántico, pero esa es una de las características que define la poesía de Mondstadt.
- Paimon: Está bien, tratemos de concretar. ¿Cuáles decía el poema que eran los ingredientes? Humm... Hummmm...
- Paimon: “La valentía para explorar, la ternura para amar, la perseverancia del guardián, y... la canción de ánimo.... de los mil vientos...”.
- Paimon: Nop, Paimon no tiene la menor idea de a qué se refiere todo esto.
- Paimon: Oye, bardo de pacotilla, seguro que sabes qué significa todo eso. ¿Podrías hacernos el favor de darnos una pista?
- Venti: No me malinterpreten. No pretendo hacer que se lo ganen o algo parecido, pero la letra es las que es. Si hay algo que no haya mencionado, ni siquiera yo puedo llenar los espacios en blanco.
- Venti: Si quieren descubrir el secreto tras este dulce aroma, puede que tengan que tomar cartas en el asunto ustedes mismos...
- Paimon: ¿Tomar cartas en el asunto? ¿Quieres decir que tenemos que ir y hacer este vino nosotros mismos, y de alguna manera eso nos enseñará lo que queremos saber?... ¡Más vale que esto no sea una broma!
- Venti: Nos conocemos desde hace tanto tiempo, ¿y todavía no confías en mis intenciones? Me rompes el corazón...
- Razor: Yo confiar. Yo... querer intentar.
- Razor: Yo querer... hacer vino, y encontrar respuestas.
- Razor: Si saber cómo hacer vino, entonces yo saber qué contener vino de padre y madre.
Si hacemos lo mismo que ellos, tal vez logremos entenderlos...
Si hacemos esto, sabremos qué clase de personas eran.
- Razor: Sí.
- Razor: Yo querer... saber sobre ellos.
- Paimon: Bueno, si tú lo dices, Razor, supongo que esta vez tendremos que creer en la palabra del bardo de pacotilla. Lo intentaremos, y ya que somos primerizos en la elaboración de vinos, ¡no hay de que avergonzarse si sale mal!
- Venti: No se preocupen, de verdad. La libertad es la clave. No es tan difícil como creen.
- Venti: Solo tienen que poner los ingredientes con alegría y sinceridad, y seguro que conseguirán el resultado deseado.
- Razor: ...
- Razor: Yo ir a recitar el poema a maestra.
- Razor: Y también... pensar solo.
- Paimon: Ese es el espíritu. Entonces, encontrémonos de nuevo en dos días en el mismo sitio, ¿qué te parece?
- Razor: De acuerdo. Yo recordar. Hasta luego.