El sueño de la mariposa

El sueño de la mariposa es el primer acto de la misión legendaria de la historia de Xiao: Alatus Nemeseos.

Durante el acto, el Viajero se encuentra con un montón de Hilichurls con una energía oscura inusual, y durante la confrontación se encuentra con un hombre que afirma ser un adeptus.

Misiones[]

Resumen[]

Fuera de Posada Wangshu, el Viajero y Paimon encuentran dos Hilichurls que emiten un aura malévola a su alrededor. Preocupados por la seguridad de los huéspedes de la posada, el Viajero los derrota. Luego ven otro par de hilichurls malévolos y cuatro personas, uno de ellos un hombre enmascarado que los ahuyenta.

El hombre se presenta como un adeptus llamado Ladrón de Estrellas. Les pregunta qué quieren, pero cuando el Viajero expresa dudas, les dice que primero hablen con sus seguidores. Los seguidores les dicen que Ladrón de Estrellas concede milagros, pero tuvieron que pagarle a Mora por sus servicios.

Ladrón de Estrellas luego les pregunta una vez más por su deseo, y el Viajero le dice que están buscando a su hermana desaparecida. Paimon se niega a darle a Mora, por lo que el Viajero opta por un plato. Luego sugiere que se dirijan a Casa de Libros Wanwen para ver si tienen nuevos libros de cocina.

Dirigiéndose a la librería en busca de una nueva receta, la pareja ve a Ladrón de Estrellas comprando el libro "Yakshas: los guardianes Adeptus". Desconcertados sobre por qué un adeptus necesitaría comprar un libro sobre sí mismo y ahora desconfiados, Paimon y el Viajero echan un vistazo a una de sus copias. La historia se desarrolla en la antigüedad, cuando monstruosidades formadas por la ira vengativa de dioses pasados causaron estragos en Liyue. Para combatir el caos, Rex Lapis asignó a varios adeptus para que se convirtieran en Yakshas para purgar a los demonios, pero la crueldad del brutal combate finalmente comenzó a afectarlos. Al final, solo quedó un Yaksha; el Conquistador de Demonios, a quien la pareja reconoce como Xiao.

Después de leer la historia, Paimon y el Viajero comienzan a sospechar que Ladrón de Estrellas es un fraude. Al regresar a las afueras de la posada una vez más, encuentran Ladrón de Estrellas y su grupo con más hilichurls malvados. Ladrón de Estrellas intenta ahuyentarlos, pero falla y se pregunta por qué su Sello del Permiso no funciona. Con todo el grupo acobardado por el miedo, el Viajero derrota a los monstruos antes de que puedan causar algún daño. Ladrón de Estrellas intenta afirmar que está demasiado cansado, pero Paimon ya no cree en sus afirmaciones. Al ver otro grupo de Hilichurls malvados, aconseja al Viajero que use su Visión Elemental para seguir el aura malvada.

Rastrean el aura de los Hilichurls y encuentran a Xiao con tres hilichurls muertos. Xiao se sorprende al ver a la pareja, pero les admite que él fue quien causó el problema en primer lugar con su karma. Paimon se da cuenta de que el libro decía la verdad y se compadece de Xiao, pero les dice que el libro es "ficción" y que sus compañeros caídos se sentirían insultados por sus lágrimas. Xiao les dice que está a punto de entrar en la cueva cercana y va a usar el Azote de todos los males para limpiarla. A pesar de insistir en que puede manejar la tarea solo, Paimon sugiere que ella y el Viajero lo acompañen, lo que él permite a regañadientes.

En el interior, el Viajero y Paimon observan cómo Xiao extermina a los demonios con facilidad. Paimon le pregunta si sabe de un adeptus llamado Ladrón de Estrellas. Xiao afirma que no ha oído hablar del nombre y se disgusta cuando ella le dice que está concediendo los deseos de la gente. Paimon también le dice que Ladrón de Estrellas ha estado usando un Sello del Permiso para exorcizar a los demonios, lo que alarma a Xiao ya que es la razón por la que los demonios se habían estado congregando en primer lugar.

Xiao afirma que tendrían que confiscar el Sello, o el problema aumentaría. Al preguntarse cómo podían hacerlo sin violencia, Xiao recuerda que posee una técnica llamada Sonambulismo; aunque normalmente se usa para separar el alma del cuerpo, también se puede usar para llamar a los espíritus de otros. Les dice que para preparar el ritual necesitarán un incensario, algunas lámparas ceremoniales y elementos para bajar la temperatura.

El Viajero localiza el santuario para conseguir los artículos que necesita, bajo la guía de su protector Pervases. Cuando la forma humana de Pervases desaparece y, en cambio, les habla a través del recipiente de una estatua, se revela que él era el estudiante menor de los Yakshas. Sintiendo la carga kármica de Xiao sobre ellos, les dice que le envíen sus saludos, agregando su último deseo triste de probar el Pescado a la parrilla de Mondstadt de nuevo.

Después de que Xiao y el Viajero inician con éxito el ritual, el alma de Ladrón de Estrellas aparece ante ellos, creyendo que es un sueño. Ladrón de Estrellas está aterrorizado y suplica misericordia, creyendo que son adeptus. Paimon luego dice que no lo son, pero Xiao si, quien regaña a Ladrón de Estrellas por sus acciones. Ladrón de Estrellas luego le pregunta a Xiao su nombre, solo para que el Viajero le diga quién es en realidad. En un giro sorprendente, Ladrón de Estrellas comienza a elogiar a Xiao, admitiendo que es su fan.

Ladrón de Estrellas luego le explica al Viajero que conoce a Xiao porque su abuelo era un folclorista que le contó sobre las hazañas de Xiao cuando era niño, de ahí que coleccionara libros sobre Yakshas. Cuando registró las pertenencias de su padre, encontró un Sello del Permiso y comenzó a disfrazarse como un adepto por diversión, pero finalmente se dejó llevar por la codicia y la atención. Ver a Xiao en persona le ha hecho darse cuenta del error de sus caminos, y le jura que nunca volverá a operar bajo falsedades. Xiao acepta su juramento y lo despide. Para preocupación de Paimon, ella se da cuenta de que se olvidaron de preguntarle sobre la devolución del sello y le sugiere al Viajero que regresen a la Posada Wangshu al día siguiente.

Al regresar a la posada, el Viajero habla con Verr Goldet, quien les informa que Ladrón de Estrellas, bajo el nombre de Wang Ping'an, se había marchado de la posada, no sin antes dejarles una carta. Inicialmente creyendo que es un truco final, Paimon se sorprende al descubrir que el contenido de la carta es una disculpa; Wang emprendió un viaje de autorreflexión y devolvió el dinero que les había quitado a sus seguidores. También les da algunas baratijas y el Sello.

El Viajero le da el sello a Xiao, quien les agradece por su ayuda. Para sorpresa tanto del Viajero como de Paimon, pide Pescado a la parrilla de Mondstadt en lugar de Tofu de almendras, deseando honrar a su viejo amigo. Luego lo dejan solo para que pueda disfrutar de su comida en paz.