Los Cuatro Vientos son cuatro entidades a las que el Arconte Anemo, Barbatos, confió la seguridad y protección de Mondstadt antes de desaparecer hace 1,000 años.
Descripción[]
Los Cuatro Vientos no se establecieron oficialmente hasta que Vennessa, fundadora de los Caballeros de Favonius, ascendió a Celestia y se convirtió en el Halcón del Oeste. Ella, anteriormente, portaba el título de León del Sur hasta que ascendió, y comenzó la tradición de pasar de caballero a caballero. Sin embargo, los otros dos de los Cuatro Vientos habían estado protegiendo Mondstadt junto a Barbatos durante miles de años antes de esto.
Andrius, que una vez fue el dios de las ventiscas y el Rey del Viento del Norte, vivió en Mondstadt mucho antes de que se estableciera la actual ciudad de Mondstadt. Durante la Guerra de los Arcontes, Andrius llenó la tierra de Mondstadt con un invierno interminable mientras luchaba contra Decarabian, el Dios de las Tormentas. Después de la rebelión que mató a Decarabian y vio el ascenso de Barbatos como Arconte Anemo, Andrius, quien se vio a sí mismo incapaz de ser un arconte debido a su falta de amor por la humanidad, se dio cuenta de que sus poderes solo podían causar daño, así que decidió continuar, permitiendo sus poderes para fluir hacia la tierra y nutrirla. No obstante, su espíritu continúa viviendo y actualmente habita en el Reino de los Lobos. En momentos de necesidad, puede manifestar un cuerpo de viento y hielo.
Dvalin, aunque no es el primero de los aliados de Barbatos, se dice que es el mayor que los otros miembros de los Cuatro Vientos. Nació en Gaotian, lo que significa que surgió de la energía elemental, él es un antiguo dragón de viento que se dice que es tan poderoso como los demonios de Teyvat. Dvalin vagó por la tierra huyendo de los humanos asustados, hasta que escuchó a Barbatos tocando música con su lira, donde aterrizó y observó al Arconte, decidiendo quedarse con él como deseaba que todas las almas lo entendieran como era el arconte. Fue a través de Barbatos que aprendió el habla humana y fue amado por la gente de Mondstadt.
Los Cuatro Vientos solían ser adorados por la gente de Mondstadt. Cada uno de los Cuatro Vientos (excepto el Dragón del Este) tiene un Templo dedicado a ellos donde los residentes solían mantener, adorar y dar ofrendas a los Vientos del interior. Incluso solía haber sacerdotes dedicados para cada templo. Con el tiempo, la gente de Mondstadt ha olvidado sus antiguas tradiciones relacionadas con los vientos, y desde entonces las estructuras han sido abandonados y arruinados. Sin embargo, el poder de los Cuatro Vientos sigue activo a pesar de que su gente ha perdido la fe en ellos.
Miembros[]
| Titulo | Miembro actual | Miembro/s anterior/es | Templo |
|---|---|---|---|
| El Lobo del Norte | Andrius | Ninguno | Templo del Lobo |
| El León del Sur | Jean | Vennessa Arundolyn Varka |
Templo del León |
| El Dragón del Este | Dvalin | Ninguno | Ninguno |
| El Halcón del Oeste | Vennessa | Ninguno | Templo del Halcón |
Curiosidades[]
- El León del Sur es una posición única entre los Cuatro Vientos, ya que se transmite a los humanos a través del título de "Caballero Diente de León" o "Caballero Colmillo de León". Tradicionalmente, este título se transmitiría a los dignos, y todos los Maestros de los Caballeros de Favonius a lo largo de los siglos han heredado estos títulos. Como tal, actualmente no se conocen todos los poseedores del título de León del Sur a lo largo de los últimos 1 000 años.
- Vennessa es la única miembro que ha ocupado dos posiciones de los Cuatro Vientos.
- Los tres templos de los Vientos aparecen en las Misiones de Arconte durante el Capítulo del Prólogo, en el Acto I:
- Vientos del pasado, tiene lugar dentro del Templo del Halcón, con el personaje Amber.
- Curso intensivo, tiene lugar dentro del Templo del Lobo, con el personaje Kaeya.
- Chispas entre las páginas, tiene lugar dentro del Templo del León, con el personaje Lisa.
- Se desconoce qué sucedió con el Templo del Dragón o si alguna vez existió, pero es posible que haya sido destruido o perdido en el tiempo.