Callejón sin salida es la cuarta parte de las Misiones de Arconte del Intermedio: Acto II.
Detalles[]
- Habla con Paimon
- Habla con Kuki Shinobu
- Entra en el nuevo dominio
- Habla con Yanfei
- Derrota a los enemigos
- Solo podrás utilizar a Yanfei.
- Oleada 1:
Ladrón de Tesoros - Centinela × 2,
Ladrón de Tesoros - Aplastador × 1
- Oleada 2:
Ladrón de Tesoros - Mozo × 2,
Ladrón de Tesoros - Centinela × 1
- Habla con Yanfei
- Busca más pistas en este espacio
- Habla con Yelan
- Derrota a los enemigos
- Solo podrás utilizar a Yanfei y Yelan.
- Oleada 1:
Guerrillero con Cañón Pyro × 1,
Guardia con Cañón Cryo × 1
- Oleada 2:
Recaudador Pyro × 1
- Habla con Yelan
- Entra en el nuevo espacio
- Habla con Xiao
- Derrota a los enemigos
- Habla con Xiao
- Entra en el nuevo espacio
- Habla con todos
- Atraviesa el Abismo
- Alcanza a "la persona buscada"
- Sigue a tu hermana
- Habla con todos
- Abandona el espacio donde se encuentran
Recompensas[]
Diálogos[]
- (Habla con Paimon)
- Paimon: *Bosteza*.
- Paimon: Espera... ¿Dónde estamos?...
Seguimos en el subsuelo.
Paimon, ¿te encuentras mejor?
- Paimon: ¡Sip, mucho mejor! Paimon se asustó un poco porque nunca antes había visto un lugar tan insólito como este...
- Paimon: Quién se habría imaginado que Paimon, la mejor guía de Teyvat, se vería algún día tan abrumada... Jajaja...
Estabas agotada y asustada... es normal.
Siempre estaré contigo, Paimon.
- Paimon: Sí. Jeje...
- Paimon: Por cierto, Paimon tuvo un sueño de lo más raro. No paraba de oír mugidos...
- Ushi: ¡Muu!
- Paimon: ¡Sí, justo ese sonido!
- Paimon: Oh, Ushi, ¿estuviste cuidando de Paimon todo el rato?
- Ushi: Muu, muu.
- Xiao: ...
- Yanfei: Viajero, parece que el Gran Cazador de Demonios se ha despertado.
¿Cómo te sientes?
- Xiao: ... Estoy bien. No te preocupes.
- Xiao: El karma de Yaksha que llevo encima es peligroso para los humanos. Manténgase alejados.
- Yanfei: Bueno, yo tengo sangre de Adeptus, así que no me preocuparía por eso.
- Xiao: ... Aun así.
- Paimon: ¿Qué ocurrió mientras Paimon dormía? ¿Cómo es que Xiao está aquí?
- Xiao: Con un poco de ayuda, encontré la forma de llegar hasta aquí.
Todo gracias a Yanfei.
- Yanfei: Gran Cazador de Demonios, ¿podrías contarnos qué pasó antes de que te unieras a nosotros?
- Xiao: No hace falta que seas tan formal, solo llámame Xiao.
- Yanfei: Oh, de acuerdo.
- Xiao: ...
- Xiao: Solo algunas peleas inútiles.
- Xiao: Vine aquí en busca de alguien, pero cuando lo encontré... no era en absoluto como me lo esperaba.
- Yanfei: Madam Ping mencionó que sueles estar en la Posada Wangshu para proteger el camino principal que atraviesa el Pantano Dihua. Es extraño que salgas tú mismo a buscar a alguien... ¿Se trata de un Adeptus?
- Xiao: ...
- Xiao: Estoy buscando a un Yaksha llamado Bosacius.
(Estoy seguro de haber oído ese nombre antes...)
- Yanfei: Bosacius... ¿Es uno de los cinco Yakshas, como tú?
- Yanfei: Pensé que eras el único que quedaba. Y que los otros cuatro... ya no estaban en este mundo.
- Xiao: Podría decirse así. Pero el cuerpo de Bosacius es el único que nunca fue encontrado.
- Xiao: Los Yakshas tenemos que lidiar con los restos de los dioses y por eso sufrimos un karma contaminado. Con el tiempo, esto nos lleva inevitablemente a la locura... La última vez que vi a Bosacius fue el día en el que enloqueció.
- Xiao: Se marchó. Nadie supo jamás a dónde fue, ni yo volví a tener noticias suyas.
- Xiao: Pero Bosacius era el mayor de todos nosotros. Una vez nos dijo que, como Yakshas, tendríamos que librar innumerables batallas y que, tanto en la vida como en la muerte, teníamos que cuidarnos mutuamente, teníamos que saber el paradero de cada uno en sus momentos finales.
- Yanfei: ¿Acaso... también se olvidó de esta promesa al enloquecer?
- Xiao: Es posible. Pero yo no la he olvidado.
- Xiao: Soy el único superviviente, así que es mi deber descubrir el paradero de los demás.
- Paimon: Entonces, ¿por qué viniste a la Sima? ¿Encontraste indicios de que Bosacius estuviera aquí?
- Xiao: ¿Sabían que hace quinientos años las bestias de Khaenri'ah invadieron la Sima?
Algo he oído.
- Xiao: Esa guerra duró mucho. Hay rumores de que se vio a un valiente Yaksha luchando heroicamente en mitad de la batalla.
- Xiao: Pero nadie sabía cuál era su nombre.
- Yanfei: Sin embargo, había mucho más que cinco Yakshas en total, así que no existe certeza de que fuera Bosacius.
- Paimon: Guau... Entonces, si viniste hasta aquí para investigar, debes de pensar que se trata de él, ¿cierto?
- Xiao: No tengo ninguna certeza, y esta era la única pista que tenía.
- Xiao: Pero Bosacius era orgulloso. Habría proclamado su nombre de haber participado en esa guerra. Así que al principio... pensé que ese Yaksha anónimo no era él.
¿Encontraste a Bosacius?
- Xiao: ...
- Yanfei: Un momento, ¿así que era Bosacius con quien estabas peleando? ¿Fue él quien te hirió?
- Xiao: Así es.
- Paimon: No puede ser...
- Yanfei: La invasión de las bestias de Khaenri'ah, la batalla en la Sima y el antepasado de Yelan... Tengo el presentimiento de que están todos conectados.
- Yanfei: La vida está llena de coincidencias, pero esta es demasiada coincidencia. ¿Estará todo esto relacionado también con la Brújula fantástica que menciona el testamento?
- Xiao: ¿Qué testamento?
- Yanfei: Oh, eso. Vine aquí a causa de un testamento.
- Yanfei: Posiblemente no estés muy familiarizado con ello, ¿cierto? En realidad, tanto los Adeptus como los mortales a veces dejan escritos sus últimos deseos para que alguien los lleve a cabo una vez fallecidos. A esto se le denomina "últimas voluntades y testamento".
- Xiao: Y esto... ¿puede hacerse en cualquier momento?
- Paimon: Guau, guau, ¡¿quieres ponerte a escribir un testamento ahora?!
- Xiao: ...
- Xiao: No fue accidental que vieran mi ilusión aquel día. Este espacio utilizó sus deseos de encontrarme para tenderles una trampa en la que entraron por su propio pie.
- Xiao: Un engaño puro y duro es fácil de descubrir, pero una trama de verdades y mentiras es algo realmente temible: Lo que oyeron fueron cosas que yo realmente dije.
- Xiao: Se aseguró de usar mi verdadera voz para sembrar el pánico. Esta comunicación unidireccional fue el cebo.
- Xiao: Ya podríamos haber perdido a alguien de no haber logrado ponernos en contacto a través de la brecha espacial. Más que matar a sangre fría, este espacio parece más inclinado a consumir el alma.
- Paimon: ¿Cómo es eso posible?
- Xiao: Nuestro oponente es muy astuto. No es seguro quedarse aquí.
- Xiao: Escuchen, tanto si completamos lo que vinimos todos a hacer como si no, tengo que encontrar la manera de sacarlos de aquí.
- Yelan: ...
- Xiao: Vine hasta aquí para advertirles de que este espacio es extremadamente peligroso. Si se quedan durante demasiado tiempo... podría devorarlos.
- Paimon: ¿Cómo sabes eso?
¿Qué pasa si este espacio nos devora?
- Xiao: ... Podrían convertirse en una sombra de su yo anterior que vaga por el subsuelo como un alma perdida.
- Yelan: Parece como si ya hubieras visto algo así...
- Yanfei: Ah, Yelan, estás aquí.
- Yelan: Llevo aquí ya un rato. Estuve escuchando su conversación.
- Yelan: Yo también he visto cosas extrañas aquí abajo. Objetos que no deberían estar aquí, figuras extrañas que aparecen y desaparecen... No creo que nada de todo eso sea real.
- Yanfei: ¿Son solo ilusiones...?
- Xiao: Al principio yo pensaba igual.
- Xiao: Pero no es algo tan simple. Puede que llegue el día en que estas ilusiones se vuelvan reales y te ataquen.
- Yelan: A juzgar por lo que decías antes, ¿acaso sabes cómo salir de aquí?
- Xiao: No lo sé con certeza... Solo lo supongo.
- Xiao: Como dice Yanfei, este espacio es caótico e inestable, pero tienen sus puntos débiles. Pude crear una grieta y pasar de un espacio a otro atacando en el punto donde ambos espacios conectan.
- Xiao: Así que... si uso toda mi energía, podría abrir un pasaje que nos lleve fuera de este espacio tan caótico.
- Yelan: ¿De veras? Yo también pensé en la posibilidad de que los ataques especialmente poderosos puedan afectar al espacio en sí.
- Yanfei: ¿Qué quieres decir con "si uso toda mi energía"?
- Xiao: ... Que agotaré todas mis fuerzas.
- Paimon: Espera un momento, cuando decías que nos sacarías a todos de aquí... ¿querías decir que tú te quedarías detrás?
- Yelan: No puedes estar hablando en serio...
- Xiao: ...
- Xiao: Tras ver a Bosacius en el subsuelo, comprendí lo aterrador que es este lugar.
- Xiao: Si doy un golpe con todas mis fuerzas solo podré abrir una pequeña brecha. Para enviarlos al mundo exterior, tendré que canalizar toda mi energía de forma continuada para mantener el túnel abierto.
- Xiao: ... Sé lo que es luchar hasta el final, puedo hacerlo.
¡Pero si agotas toda tu energía, tú... !
- Yanfei: No... ¡Ni en sueños! Aunque sea cierto, no puedo permitir esto.
- Paimon: ¡Paimon también se opone! ¡Vaya porquería de plan de escape si tenemos que dejar a alguien atrás!
Debemos salir todos juntos.
- Xiao: Para juzgar si un plan es bueno o malo, primero hay que tener otras alternativas, y ese no es el caso ahora. Dudo que seguiríamos atrapados aquí si alguien hubiera tenido una mejor idea.
- Yanfei: ¿Pero estás seguro de que tu método funcionará?
- Xiao: No.
- Paimon: ¿Te has vuelto loco? No puedes jugarte la vida en algo de lo que ni siquiera estás seguro, ¡no vale la pena!
- Yanfei: En resumen, yo no acepto ese plan.
- Xiao: ¿Y si les digo que... esta es mi última voluntad?
- Yanfei: Pero...
- Yelan: Así que esa es tu estrategia, ¿eh?
- Yelan: Perdona mi franqueza, pero no hay ninguna garantía de que este plan tuyo funcione o incluso de que sea seguro.
- Yelan: Lo dijiste tú mismo. Los Yakshas suponen un peligro para los mortales. ¿Quieres que aceptemos tu plan de mártir salvador solo porque tú lo digas?
- Xiao: El campo de batalla es un lugar despiadado donde te lo juegas todo en cada oportunidad que tomas. Si temes fallar y pagar el precio, nunca saldrás victorioso.
- Yelan: Yo también he librado unas cuantas batallas peligrosas, así que sé muy bien que nunca se deben proponer estas medidas extremas hasta el último momento.
- Xiao: ...
- Yelan: Dices todo esto esperando que lo comprendamos y aceptemos. Pero si ni siquiera tú sabes de qué va a servir tu propio sacrificio, lo único que consigues es debilitar la moral de todos.
- Yelan: Además, si tan decidido estabas a dejarlo todo, no nos habrías pedido nuestra opinión. Crees que eres frío e insensible, pero yo no lo creo.
- Yelan: En cualquier caso, ¿qué es eso de perder a uno para que los demás puedan escapar? Eso en absoluto puede considerarse como salir victorioso.
- Yanfei: Yelan... No te pongas así...
- Yelan: ...
- Yelan: Lo que quiero decir es que aún no es el momento para medidas drásticas. Es posible que haya algún pasaje oculto que conduce a una salida que aún no hemos descubierto.
- Xiao: ¿Y si no la hay o no la encontramos? ¿Y si al final estoy tan debilitado que no tengo ni fuerzas para sacrificarme... ? ¿Qué hacemos entonces?
- Yelan: Tal y como están las cosas, en cuanto a probabilidades de éxito, no hay mucha diferencia entre que te sacrifiques y que intentemos buscar otra salida. Si no podemos determinar qué estrategia es mejor, tampoco debemos actuar de forma precipitada.
(Yelan se está enfadando de verdad...)
(El ambiente está demasiado tenso... ¿Qué debería hacer?)
- Arataki Itto: ¿Alguien dijo algo sobre dar un golpe con todas sus fuerzas? Jaja, así es, lo oí todo.
- Arataki Itto: Me da igual lo que digan. Al final, lo único necesario es... ¡¡esto!!
- Arataki Itto: ¡Vamos, a ver si puedes atraparnos aquí!
- Yelan: Espera...
- Con el fin de evitar el conflicto entre Yelan y Xiao y para tener una posibilidad de supervivencia, Arataki Itto utiliza todas sus fuerzas para destrozar la pared de piedra. Tras la brecha se halla un camino desconocido hasta ahora...
- (Habla con Kuki Shinobu)
- Kuki Shinobu: *Suspira*... ¿Por qué siempre haces cosas como esta?
- Yanfei: ¿Shinobu...?
- Paimon: ¿Qué le ha pasado a Itto? ¿Se ha desmayado?
- Ushi: ¡Muu!
- Kuki Shinobu: El jefe usó toda su fuerza en ese puñetazo. Quizá por eso fue capaz de abrir un camino.
- Yelan: ... Déjenme ver si puedo estabilizarlo.
- Yanfei: Actuó así porque nos oyó discutir, ¿verdad?
- Kuki Shinobu: Lo cierto es que el jefe... no soporta los conflictos entre compañeros.
- Kuki Shinobu: Siempre que hay alguna discusión entre los miembros de la Banda de Arataki, el jefe siempre va y hacía alguna tontería para amedrentarlos.
- Kuki Shinobu: Hoy lo ha vuelto a hacer. Puede que no les conozca desde hace mucho, pero cuando dice que todos somos un equipo, lo dice de verdad.
- Ushi: Muu.
- Kuki Shinobu: Otra cosa que detesta el jefe es que los demás se sacrifiquen, pero él suele acabar sacrificándose a sí mismo... No obstante, hay una pequeña distinción en lo que a él respecta.
- Kuki Shinobu: Cuando hace cosas así, no es que se abandone a sí mismo, sino que confía en que podrá superar cualquier dificultad que se le presente.
- Paimon: Tremendo ego... Y además, ¿no ha hecho precisamente lo que Xiao sugirió? ¡Vaya tonto!
¿Por qué no trataste de impedírselo?
- Kuki Shinobu: El jefe casi nunca escucha a nadie y además siempre actúa de forma impulsiva. No hay duda de que estaba convencido de que podría resolver todos los problemas de un puñetazo.
- Kuki Shinobu: Y no solo es él. Otros miembros de la Banda de Arataki son más o menos igual. Por eso necesitan a alguien como yo para pagar los platos rotos.
- Kuki Shinobu: No podría contenerlo aunque lo intentase, así que es mejor dejarlo hacer. Además, ese cerebro de chorlito parece que tiene un sexto sentido muy preciso. Quizá ese puñetazo no fue en vano y nos sirva para salir de aquí.
- Paimon: Ehmm... Itto... Dile a Paimon que estás bien...
- Xiao: ... Lo siento.
- Kuki Shinobu: No es nada, no tienes que disculparte. Tanto tú como la señorita Yelan tenían razón.
- Kuki Shinobu: No obstante, si esta fuera la Banda de Arataki y tú fueras uno de nuestros miembros, debo decir que me pondría de parte de la señorita Yelan.
- Kuki Shinobu: El jefe no se estaba sacrificando en absoluto. Él estaba firmemente convencido de que podríamos encontrar un camino a través del pasaje que abrió, y ciertamente no espera que lo dejemos detrás.
- Kuki Shinobu: Todos y cada uno de nosotros somos importantes. Tenemos que apoyarnos mutuamente si queremos salir de aquí. Su supervivencia es importante para algunos... no, para muchos.
- Paimon: Shinobu...
- Kuki Shinobu: Esforcémonos al máximo para tratar de encontrar una salida. Aún tenemos una oportunidad... Estoy segura de que lograremos escapar.
- Kuki Shinobu: Yo me encargo del jefe, no se preocupen.
- Xiao: ...
- Yelan: Oigan, parece que este pasaje no conduce al exterior, sino que se adentra aún más.
- Paimon: ¿Cómo?... Entonces lo que hizo Itto fue para nada...
- Yelan: No, aun así vale la pena explorarlo. Iré a echar un vistazo primero.
- Yanfei: Oh, ya veo. Entiendo lo que quieres decir.
- Paimon: ¿Eh? ¿El qué?
- Yanfei: Aún no he encontrado lo que vine a buscar, ese dispositivo mágico. ¿ Recuerdas?
- Yanfei: Si este dominio tiene el poder de proyectar como algo real las cosas que imaginamos o que buscamos... Bueno, puedo aprovecharlo para encontrarlo.
- Paimon: ¡Oh, es verdad! Paimon ahora entiende que siempre estuviera diciendo que aguantásemos un poco más... Si se trata de un dispositivo mágico, ¡debe ser superpoderoso!
- Yanfei: Bueno, no puedo asegurar que sea así, pero vale la pena intentarlo.
- Xiao: Encontraré una solución.
Espera...
- Yanfei: Déjalos ir, Viajero. Pero si quieres ir tú también a ese dominio, será mejor que vengas conmigo.
- Yanfei: Al final no soy más que una abogada, jeje, así que será más seguro si vamos juntos.
- Yanfei: Por cierto, humm... Xiao y tú parecen bastante cercanos, ¿cierto? Yelan se sobrepasó un poco hace un momento, así que quería pedirte disculpas en su nombre.
- Yanfei: Pero, a juzgar por lo ocurrido, no estoy segura de que Xiao hubiese atendido a razones si ella no le hubiera hablado de esa manera. Además... el tema del sacrificio es uno muy serio para Yelan. Intentaría detener a quien fuera por ello.
- Yanfei: Por lo que sé, ya ha perdido compañeros mientras cumplía con su deber, e incluso la han tenido que rescatar. Quizás se opone de esa manera a que otros se sacrifiquen porque ella también es una superviviente.
- Yanfei: ¿Cómo pueden las cosas volver a ser iguales para alguien que sale vivo cuando otros no? En cierto modo, ser salvado puede ser una carga.
- Yanfei: ... Si hubiese estado en el lugar de Yelan, no estoy segura de haber hecho las cosas mejor.
...
- Yanfei: ¡Oh, espera un momento! ¡Enseguida vuelvo!
- Yanfei: ¡Ja!
- Yanfei: Bien, así es más seguro. Ya que Itto no puede pelear, he lanzado un conjuro de protección para ustedes.
- Kuki Shinobu: Muchas gracias. Ten cuidado.
- Yanfei: Claro, ustedes también.
- Yanfei: Bien, viajero, ¡en marcha!
- (Habla con Yanfei)
- Yanfei: ¿Qué es esto... ?
Un lugar extraño y maravilloso a la vez.
El espacio-tiempo totalmente sumido en el caos.
- Yanfei: Mira ese disco enorme allá a lo lejos... Espera, ¿no es eso la Brújula fantástica?
Es más grande que la olla de un hospicio.
Es más grande que todas nuestras cabezas juntas.
- Paimon: ¿Cómo? ¿Es esa la mejor descripción que puedes encontrar? ¡Es mucho, mucho más grande que eso!
- Yanfei: *Suspira*... Bueno, parece que nuestra teoría era acertada. En mi humilde opinión de asesora legal, eso es casi seguro el dispositivo mágico que estaba buscando. Realmente apareció...
- Yanfei: Pero si se trata realmente de la Brújula fantástica... ¡Es demasiado grande! ¡¿Cómo voy a meter eso en mi oficina?!
- Yanfei: *Ejem*... Vamos, Yanfei, no debes rendirte. Investiguemos el área primero, Viajero.
- Yanfei: ¡Por los Siete! ¿Esos no son... ladrones de tesoros?
¿Cómo puede haber aquí ladrones de tesoros?
- Yanfei: Me resultan muy familiares... ¡Oh, cierto! Son los matones con los que me topé hace unos días.
- (Habla con Yanfei)
- Yanfei: Fue pan comido, igual que la otra vez.
- Yanfei: En realidad estaba trabajando en un importante caso comercial cuando me los encontré anteriormente. La parte perdedora contrató a unos ladrones de tesoros para vengarse de mí.
El trabajo de asesor legal parece duro...
- Yanfei: Bah, es el pan de cada día. Por fortuna estoy bien entrenada en artes marciales, así que resultó bastante fácil encargarme de ellos.
- Yanfei: Pero estos eran exactamente los mismos tipos que me encontré la vez pasada... ¿Acaso este espacio está recreando escenas sacadas de mi memoria?
- Yanfei: Me temo que esta es una de las artimañas usadas para devorarnos... Es increíble.
- (Habla con Yelan)
- Yanfei: Creí que podríamos encontrarnos aquí con otra gente, pero parece que no...
Yanfei, ¿qué fue ese sonido?
- Yanfei: ¿Los Fatui? ¿Son también un recuerdo de alguien?
- Han aparecido los Fatui...
- Yanfei: ¡Ahh, tengan cuidado!
- Yelan: Hum, justo lo que pensaba.
- Yanfei: ¡Yelan, estabas aquí!
- Yelan: ¡Acabaré con ustedes, no importa cuántas veces aparezcan!
- Yanfei: Oye, relájate, ya estamos todos juntos.
- (Derrota a los enemigos)
- Voz misteriosa: No puedo abandonar ¿... salir?
- Voz misteriosa: ... Yo... registré... Brújula...
- Voz misteriosa: ... Mi... casa...
- (Habla con Yelan)
- Yelan: Panda de aficionados. Y aún se atreven a seguirme.
- Yanfei: Veo que sigues estando en forma.
Esa voz de hace un momento...
- Yelan: ¿Recuerdan que dije que yo misma había visto algunas ilusiones?
- Yelan: Son las mismas palabras que oí la otra vez. Este espacio parece estar reproduciendo ese recuerdo...
- Yelan: Ahora que saben eso, ya estamos todos al corriente de la situación.
- Yanfei: Esa persona mencionó la palabra "brújula"... ¿Se refería a la Brújula fantástica?
- Yelan: Yanfei, ¿ves eso que hay en el suelo?
- Yanfei: Sí, pudimos reunirnos contigo después de usarlo. Supongo que es una versión en miniatura de la Brújula fantástica que se ve ahí a lo lejos... Está estrechamente conectada con todo este espacio.
- Yelan: Humm, me resulta familiar. Deja que piense...
- (Habla con Xiao)
- Yelan: ... Un nuevo espacio.
- Yanfei: Si aplican las mismas reglas en todo este espacio, debería haber una Brújula fantástica en miniatura por aquí cerca.
- Xiao: ... Bosacius, nunca pensé que alguien como tú acabaría convertido en un alma perdida en el subsuelo.
¡Xiao!
- Yelan: ¿No hay enemigos? Aquí hay algo que falla...
- Yanfei: Espera... ¿el enemigo está ocultándose? Oh, no, debemos ir a ayudarle...
- Xiao: ¡Quietos ahí!
- Xiao: Esta es mi lucha... No se acerquen.
- (Derrota a los enemigos)
- ¿?: Bestia inmunda, ¿cuántos han tenido que morir por culpa de ustedes?
- ¿?: Los atraje hasta el subsuelo porque identifiqué sus puntos débiles.
- Xiao: Bosacius siempre usa la misma táctica de ocultarse en las sombras y atacar por sorpresa.
- ¿?: ¡Muere aquí conmigo!
- Xiao: ¡Ah!
- Xiao: ¡Ja! ¿Cómo pudo morir aquí un guerrero tan formidable como tú?
- Paimon: ¡Ay! Esto no pinta nada bien para Xiao...
- Xiao: No importa... Sé como acabará esto.
- ¿?: *Uf*… *uf*...
- Yanfei: ¿Bosacius está mostrando signos de cansancio?
- Xiao: Bosacius, Mariscal Vritrá, incluso tu fuerza conoce limites...
- Xiao: Pero esta ilusión de ti no es tan poderosa como tu yo de verdad. No eres igual que en tus días de mayor gloria.
- Xiao: ¿Qué pensaría Rex Lapis si viese en qué se ha convertido su primer Yaksha?
- ¿?: ¡Salgan de aquí! Yo me encargo del resto. No podemos permitir que los monstruos lleguen a la superficie.
- ¿?: Recuerden que, sea como sea, ¡debemos mantener nuestra posición en un radio de sesenta millas de la Sima!
- (Habla con Xiao)
- Xiao: Ugh... *Cof, cof*...
- Xiao: ¡Basta! ¡Fantasma, desaparece! ¡Arg!
- Paimon: Xiao, ¿estás bien?
Ni siquiera te habías recuperado aún de tus heridas...
- Xiao: Así es como debe ser. No te preocupes por mí.
- Yelan: ¿Ese enemigo invisible era Bosacius, el Mariscal Vritrá?
- Xiao: Sí.
- Xiao: Perdonen mi obstinación. Bosacius había estado desaparecido durante siglos... Esta lucha puede que haya sido la última oportunidad que tenia de verlo.
- Paimon: Decía algo de mantener la formación a toda costa...
- Xiao: Él luchó aquí. El Yaksha anónimo de las leyendas... era él.
- Paimon: Pero ¿no decías que siempre proclamaba su nombre? ¿Por qué no ha quedado rastro de él? ¿Qué le pasó?
- Xiao: ...
- Xiao: No lo sé. Quizás él mismo olvidó quién era.
- Yanfei: ¿Porque el karma del que hablaste lo volvió loco?
- Xiao: Bosacius ya había enloquecido antes de desaparecer. No había forma de saber si sus recuerdos estaban intactos.
- Yelan: ¿Participó en la batalla de la Sima incluso estando loco?
...
- Xiao: Los Yakshas no somos una raza que pueda vivir tranquilamente en tiempos de paz. Es posible que lo atrajera el olor de la lucha sangrienta.
- Xiao: La masacre es lo que mejor se nos da... Quizá es lo único que sabemos hacer.
...
- Xiao: Esta pelea confirmó mis sospechas. Tal como nos figurábamos, este espacio refleja la información de nuestras mentes.
- Xiao: En otras palabras, Bosacius también vino aquí a pesar de haber enloquecido, y esta ilusión que vimos hace un momento era la impresión que dejó detrás.
- Xiao: Este espacio lo recreó tal como era en batalla. La forma en que luchaba era tan autodestructiva... no pudo haber sobrevivido.
Luchó contra los monstruos...
- Yelan: La ilusión de Bosacius dijo que había descubierto la debilidad de las bestias y las había atraído hacia el espacio subterráneo.
- Yelan: ¿Qué clase de lugar es este espacio? Contener a las bestias de Khaenri'ah no es algo que cualquiera pueda conseguir.
- Yanfei: Puede que solo me lo parezca a mí, pero... ¿no se sienten mucho más cansados?
- Yelan: Este espacio está afectando nuestra condición física.
- Xiao: Creo que Bosacius se quedó aquí en el subsuelo. Pero él ya no está y ahora solo permanece su ilusión.
- Xiao: Si no nos vamos de aquí, puede que corramos su misma suerte.
Vámonos.
- Xiao: Hora de irnos.
- Xiao: Fue una buena batalla, Bosacius. Adiós.
- (Habla con todos)
- Paimon: Parece que aquí hay información. ¿Quieres echarle un vistazo?
- Yanfei: Sí, veamos.
- Por las cartas, se enteran de que varios generales de la Geoarmada habían venido a patrullar esta zona, pero al igual que ustedes, quedaron atrapados aquí. Aunque extrañaban mucho su tierra natal, nunca pudieron volver a la superficie.
- Yelan: ...
- Yelan: Parece que son cartas escritas por soldados de la Geoarmada que estuvieron aquí.
- Paimon: ¿Quién es ese tal "Boyang" que mencionan?
- Yelan: Boyang era... uno de mis ancestros, el que no logró regresar.
- Yanfei: ¿Quieres decir que Boyang luchó junto con Bosacius?
- Yelan: Creo que sí.
- Xiao: Y los soldados de la Geoarmada eran sus compañeros de armas.
- Yelan: Supongo que ahora tenemos una mejor idea de qué fue de todas esas personas desaparecidas.
- Xiao: Sí.
- Paimon: Oh... Qué miedo. Qué habrá pasado...
- Yelan: Vamos. No podemos quedarnos aquí.
- Yelan: Tengo el presentimiento de que tarde o temprano ataremos todos los cabos y sabremos la verdad.
- Yelan: Bueno, quién sabe de qué manera nos revelará este espacio las respuestas que buscamos...
- (Habla con todos)
- Paimon: ¡Aquí no hay nada!
- Yanfei: Qué lugar tan extraño.
- Yelan: Se siente como el Abismo.
- Yelan: Pero... ¿dónde están los enemigos?
- Xiao: ...
...
Creo que son mis recuerdos.
- Paimon: ¿Tus recuerdos? ¿Recuerdos de qué?
Este vacío... es el poder del Abismo.
- Paimon: ¿El Abismo? Entonces... ¿este lugar se ha creado basándose en tu memoria?
Sí, porque siempre recordaré lo que me arrebató este lugar.
Siempre recordaré que el Abismo me arrebató a mi hermana.
- (Alcanza a "la persona buscada")
- Paimon: ¡Oh! Es... Es...
¡Lumina! Espera!
- (Habla con todos)
- Paimon: ¿Eh? ¿Qué es esta cosa redonda y brillante que hay en el suelo?
(Parece...)
- Yanfei: ¿La Brújula fantástica?
- Yelan: En los otros espacios, la Brújula fantástica siempre estaba parcialmente enterrada. Pero ahora solo está intacta sobre el suelo, como si alguien la hubiera dejado aquí.
- Paimon: Oh... ¿Ella solo fue un producto de tu imaginación?
- Paimon: Apareció como una ilusión porque la extrañas mucho, ¿no es así?
Puedo sentir que ella no está aquí.
Pero al menos encontramos esto.
- Paimon: Humm...
- Yelan: Yanfei, ¿estás segura de que esta es la Brújula fantástica que estás buscando?
- Yanfei: Sí. El testamento no incluía imágenes, pero coincide con la descripción.
- Yanfei: ¿Yelan? ¿Qué pasa?
- Yelan: Por su diseño y estructura, esta Brújula fantástica se parece mucho a los catalizadores que usa mi clan. Solo tengo que hacer esto y...
- Yelan: Humm, alguien más la ha utilizado antes. Debe de tener algún mensaje oculto en su interior.
- Yelan: Hay que salir de aquí y buscar un lugar seguro.
- (Abandona el espacio donde se encuentran)
- Xiao: Bosacius era el líder de los cinco Yakshas bajo el mando de Rex Lapis. Él era capaz de controlar el poder Electro.
- Xiao: A diferencia de mí, era un guerrero excepcional y un comandante increíble.
- Xiao: ...
- Yanfei: Ahora que ya encontré la Brújula fantástica, mi trabajo aquí ha terminado.
- Yanfei: Pero si el Bosacius que vimos solo era una ilusión, ¿realmente podremos llevarnos afuera lo que encontremos aquí? Humm...
- Yelan: Dentro de las energías positivas y negativas, en las cinco regiones, el agua, el fuego, el viento y el trueno son cíclicos como las estaciones. Toma los siete cielos desde el suelo, abre las tres puertas de par en par y el mundo entero estará al alcance de las manos...
Historial de cambios[]
- Versión 2.7
- Callejón sin salida se añadió al juego.